Hoy:

    Anemia en adultos mayores: ¿Qué síntomas da y cómo diferenciarlo?

    La anemia en adultos mayores muchas veces es silenciosa o se confunde, pero puede ser crónica y venir acompañado de enfermedades graves

    ¿Cómo se diferencia la anemia en adultos de casos en personas mayores?
    ¿Cómo se diferencia la anemia en adultos de casos en personas mayores?

    La anemia en adultos mayores podría no ser diagnosticada oportunamente, sobre todo en las formas crónicas y, por lo general, los síntomas se confunden con signos de envejecimiento y en algunos casos es la precursora de enfermedades complejas.

    En muchos casos, la anemia en adultos mayores se detecta de forma casual cuando los familiares llevan al paciente para una consulta médica por cualquier otro motivo. Por ello, es importante detectarlo y tratarlo a tiempo.

    Síntomas de anemia en adultos mayores: ¿Cómo detectarlo?

    Según el Dr. Juan Villón Almendras, médico geriatra y jefe del Servicio de Geriatría del Hospital Nacional Arzobispo Loayza del Minsa, los síntomas de anemia en adultos mayores pueden ser identificados por los tutores familiares, más aún si el paciente se encuentra en casa:

    Fatiga y debilidad

    Decaimiento y agotamiento que no mejora con el descanso, lo cual se confunde fácilmente con la "vejez". Puede llevar a una disminución de la actividad física y pérdida de movilidad, debilidad muscular y problemas de equilibrio, lo que puede resultar en fracturas graves.

    Dificultad cognitiva y somnolencia

    Problemas de concentración, pérdida de memoria a corto plazo, confusión o somnolencia diurna excesiva. Estos síntomas se confunden a menudo con el deterioro cognitivo relacionado con la edad o la demencia.

    Manifestaciones neurológicas

    Hormigueo o entumecimiento de manos y pies, especialmente en la anemia por deficiencia de vitamina B12. También puede aparecer la cefalea (dolor localizado en la cabeza, el cuero cabelludo o el cuello).

    Síntomas cardíacos

    Aunque la taquicardia (ritmo cardíaco rápido) y la disnea (falta de aire) pueden ocurrir, la anemia puede provocar o empeorar problemas cardíacos preexistentes, llevando a un mayor riesgo de insuficiencia cardíaca.

    Palidez

    Puede ser más difícil de notar en la piel envejecida. Se observa mejor en las mucosas (como encías, párpados inferiores) y las uñas.

    Es importante tener en cuenta que estos síntomas podrían reflejar un cuadro de anemia, cuyos signos suelen confundirse con los naturales del envejecimiento, pero que también podrían agravar enfermedades crónicas que posiblemente aún no se detecten. 

    ¿Cómo se diferencia la anemia en adultos de casos en personas mayores?

    La manifestación típica de la anemia en adultos se basa principalmente en cansancio extremo o debilidad general al esfuerzo, dolores de cabeza, mareos o vértigo, fatiga y palidez visible de la piel y las mucosas. 

    ¿Qué puede causar anemia crónica en adultos mayores?

    Si bien los tipos de anemia en los adultos mayores son muy parecidas a los otros grupos etarios, cobran mayor relevancia las anemias crónicas que aparecen acompañadas de enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, hipotiroidismo, enfermedades autoinmunes e incluso cáncer. 

    "Las enfermedades respiratorias y cardíacas crónicas y otras enfermedades crónicas por lo general se acompañan de anemia; por ello, se les denomina anemia crónica por enfermedades crónicas", precisó el Dr. Villón para Andina. 

    Otras causas de anemia en los adultos mayores responde a una mala alimentación, el consumo crónico de algunos fármacos que interfieren la absorción del hierro, enfermedades como úlceras pépticas del estómago y las neoplasias como las de colon y estómago.

    "Las ulceras y las neoplasias pueden provocar hemorragias digestivas agudas que provocan anemias agudas y en ocasiones también sangrados ocultos crónicos que provocan anemias crónicas.", agrega el especialista.

    Tratamiento y prevención de la anemia en adultos mayores

    El tratamiento de la anemia en adultos mayores está directamente vinculado al diagnóstico de la causa original. También se recetan suplementos como hierro, vitamina B12, ácido fólico, eritropoyetina y otros, así como también se realizan transfusiones de sangre en casos graves.

    En cuestión de prevención, se recomienda a hijos, nietos y sobrinos llevar al adulto mayor a un chequeo médico general al menos una vez al año y que incluya necesariamente un examen de hemoglobina

    Asimismo, el Dr. Villón recomienda brindar al adulto mayor una dieta balanceada que incluya proteínas, presentes en carnes rojas y menestras, además de vegetales verdes que permitan tener una adecuada ingesta de hierro.

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