La delincuencia abre la polémica sobre el derecho de legítima defensa

La ciudadanía persive que hay más inseguridad y mayor impunidad. El caso de Eduardo López saltó a las primeras planas de los diarios cuando en agosto de 2013 cuando frustró el robo a su vehículo.

"Estoy seguro que estaría muerto y sería una estadística más, un ciudadano más de bien que muere a manos de delincuentes y no pasa nada", afirma López, quien no se arrepiente de sus acciones.

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Por su parte, el exministro de Justicia, Víctor García Toma, consideró que al no existir una aplicación igual para la Ley, los ciudadanos prefieren hacer justicia por sus propias manos.

La gente actúa en legítima defensa, porque se encuentra cara a cara con el peligro, pero también hay quienes creen que la justicia será tardía o nunca llegará.

"Hay una situación palmaria, pues cuando tengo un problema acudo a quien deba resolverlo, y este no lo hace o lo hace mal, ya no me queda más que dar rienda suelta a mi impotencia, a mi indigación", indicó García Toma.

Este es el fracaso de las autoridades para hacer respetar la Ley. A falta de justicia inmediata, ¿a caso opera la ley del ojo por ojo diente por diente?

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