El sector aeronáutico estadounidense enfrenta una nueva fuente de tensión económica tras la decisión del gobierno de Donald Trump de imponer aranceles del 10 % a aviones y partes importadas. Aunque esta medida comenzó a regir en abril, el temor creció en mayo con la apertura de una investigación bajo la Sección 232 del Departamento de Comercio, que podría agravar la situación con tarifas aún más altas.

Dos de las organizaciones más influyentes del rubro, la Asociación de Industrias Aeroespaciales (AIA) y Airlines for America, han alzado la voz de manera formal para advertir sobre los efectos negativos que estas medidas podrían generar en la seguridad aérea, el costo de los pasajes y la posición competitiva de las empresas estadounidenses a nivel internacional.

Impactos económicos, operativos y de seguridad en la aviación

Desde el punto de vista operativo, uno de los principales riesgos identificados es la dificultad para acceder a piezas esenciales de mantenimiento. “Las restricciones a las importaciones podrían alterar la cadena de suministro y afectar la seguridad de los vuelos”, señaló la AIA, que agrupa a gigantes como Boeing y GE Aerospace. Airlines for America fue más allá, al advertir que los pasajeros podrían enfrentar un aumento en los precios de los boletos, además de consecuencias en el transporte de carga.

En sus comentarios oficiales, ambas organizaciones pidieron al gobierno frenar o aplazar cualquier decisión sobre nuevos aranceles y extender el período de consulta pública. “Estados Unidos no puede permitirse perder su liderazgo en aviación por medidas comerciales mal calibradas”, advirtieron desde Airlines for America.