La noche del martes 10 de junio de 2025 se tornó crítica en el centro de Los Ángeles. La alcaldesa Karen Bass impuso un toque de queda de 8:00 p.m. a 6:00 a.m. en una milla cuadrada del área más afectada por las protestas. La medida fue activada tras la intensificación de las manifestaciones contra las redadas migratorias y las políticas del presidente Donald Trump.

Aunque la concentración comenzó de manera pacífica, el clima cambió rápidamente al mediodía cuando individuos infiltrados en la multitud arrojaron objetos contundentes a las fuerzas de seguridad. La respuesta del Estado fue inmediata: se lanzaron gases lacrimógenos y se dispararon balas de goma, provocando caos y numerosos heridos entre los asistentes.

Autoridades refuerzan el control en la zona crítica

El área bajo toque de queda se delimita entre las autopistas Golden State (5) y Harbor (110), y desde la autopista Santa Mónica (10) hasta Arroyo Seco Parkway. La policía ha informado que se han realizado 197 detenciones desde el viernes, en su mayoría por incumplir las órdenes de dispersión. La vigencia de la restricción de Karen Bass siguió el miércoles 11 de junio, según un comunicado en X (antes Twitter).

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Desde el inicio de las tensiones, el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD, por sus siglas en inglés) ha detenido a 197 personas, en su mayoría por desobedecer las órdenes de dispersión. Bass advirtió que “las autoridades arrestarán a quienes incumplan el toque de queda y serán procesados”, dejando claro que las únicas excepciones son los residentes de la zona y los medios de comunicación acreditados.

El gobernador de California responsabiliza a Trump por la violencia

En una intervención televisada, el gobernador Gavin Newsom acusó al presidente Donald Trump de haber agravado la situación en Los Ángeles. Según afirmó, la decisión de enviar a la Guardia Nacional y a los Marines, a pesar de que las autoridades locales consideraban que las protestas estaban bajo control, “inflamó una situación potencialmente explosiva”.

Newsom también denunció un “abuso descarado de poder” por parte del presidente al movilizar tropas a la ciudad. Finalmente, advirtió que el país atraviesa un “momento peligroso” bajo un líder “que no quiere estar sujeto a ninguna ley o constitución”.