Presidente del Poder Judicial recomienda tratar al crimen organizado con normas de excepción

Javier Arévalo, titular del Poder Judicial, recomendó tratar al crimen organizado con normas de excepción parecidas a las que se utilizaron contra el terrorismo. "Está en manos del Ejecutivo y el Legislativo", dijo

Javier Arévalo, presidente del Poder Judicial. Foto: Andina. Video: Canal N

El presidente del Poder Judicial (PJ), Javier Arévalo, advirtió de la peligrosidad del crimen organizado en el Perú, que atenta contra la estructura del Estado al extorsionar o atentar contra autoridades electas como alcaldes y gobernadores.

De acuerdo con Arévalo, el crimen organizado ha reemplazado a los delincuentes comunes, tales como carteristas o pistoleros, y por ello recomendó tratar esta nueva modalidad de delito con normas de excepción parecidas a las que se utilizaron contra el terrorismo

“Estamos yendo a una situación de excepción. Estos grupos delincuenciales organizados atentan contra la estructura del Estado. No son el simple pistolero o simple ratero. Hay que darles otro tratamiento, quizá algo parecido a las normas de excepción que se utilizaron contra el terrorismo, y eso está en manos del Ejecutivo y el Legislativo”, dijo durante una reunión con autoridades en Lambayeque.

Arévalo invocó al Gobierno Regional de Lambayeque, Ministerio Público y municipalidades distritales, a apoyar al Poder Judicial con la instalación de Unidades de Flagrancia en esa región, cediendo locales donde pueda instalarse este modelo de justicia rápida que reduce el tiempo en trámites y traslados.

¿CÓMO FUNCIONAN LAS UNIDADES DE FLAGRANCIA?

La Unidad de Flagrancia alberga en un mismo local al Poder Judicial (jueces), Ministerio Público (fiscales), Policía Nacional (agentes PNP) y Ministerio de Justicia (abogados de la Defensa Pública).

Recientemente, se puso en funcionamiento Unidades de Flagrancia en los Distritos Judiciales de Lima Este, Lima Norte, Lima Sur, La Libertad y próximamente en el Callao.

De acuerdo con el PJ, los equipos jurisdiccionales y administrativos trabajarán con turnos permanentes de manera ordenada y planificada - incluidos sábados, domingos y feriados- durante las 24 horas, en espacios físicos contiguos y con las garantías constitucionales del debido proceso para los investigados.

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