Gerald Oropeza: conversaciones en Whatsapp revelan más sobre sus negociaciones

Oropeza López habla con un italiano acerca de un supuesto negocio con relación al Puerto del Callao

Luego del atentado en contra del Porshe propiedad de Gerald Oropeza López, se encontró el celular de uno de los ocupantes del vehículo: Antonio Sulca Cruz. Ahí se accedió a textos y audios de Whatsapp que verdaderamente parecen salidos de una película. 

Conversaciones, entre Gerald Oropeza, quien se identifica a viva voz frente a un italiano, un tal Zazá que lo llama Tony Montana. Son varios días durante los que intentan acordar por escrito un supuesto negocio con relación al Puerto del Callao. 

Se hablan de carros, de barcos, del envío de “cosas”, de fechas por cumplir, del pago de varios cientos de miles de dólares. Pero las coordinaciones parecen no ir bien. 

“Mano, yo te mando Brian con el dinero ahora porque usted no debe pensar malo de mi!!!!!! Yo ahora te demuestro yo cuando vale usted no habla mas ahora vede yo que es como hombre”, dice uno de los textos en Whatsapp.

Se trataría de Brian Camps Gutierrez, un amigo de Gerald que según su régimen migratorio viaja constantemente al extranjero coincidiendo incluso en algunos viajes con Oropeza y del que se sabe tiene 26 años y se dedica a practicar artes marciales. 

Pero no sólo se habla de Brian en las conversaciones. Zazá menciona a Renzo, lo que coincide con lo revelado por el informante que se comunicó la semana pasada con la Unidad de Investigación de América Noticias. 

“Renzo (Espinoza) Brisolessi era un jefe de la barra del Boys y Gerald lo saca de la barra para que trabaje con él. ¿Por qué lo saca? Porque el papá de Renzo tenía contactos en el Puerto y con él podían meter la droga por lancha. Su papá y toda su familia tienen unos 30 trabajadores que meten cientos de kilos diariamente.  Droga que va a Europa”, se lee en la conversación.

Pero ¿cómo nació el próspero negocio que supuestamente respalda todos estos caprichos? La empresa que compra la mayoría de propiedades y lujos que se da Gerald Oropeza,  es  Sergero SAC, una de las 4 empresas dedicadas a la limpieza y mantenimiento fundadas por su padre, el difunto dirigente aprista Américo Oropeza San Martin, asesinado a balazos en Enero del 2011 cuando postulaba para ser alcalde de San Juan de Lurigancho.  

Gerald Oropeza habría sido el principal heredero, pero los servicios de limpieza que daba su padre no le llegaban ni a los talones. Si bien, desde el 2007 figura que Oropeza padre, desde sus empresas, comienza a trabajar dando servicios a diferentes entidades del Estado, los montos girados a favor de estas van subiendo año a año como la espuma. 

La firma que más ganancias registra es Servicios Generales Ronald, es decir Sergero SAC que pasa de facturar 224 mil 881 soles en el 2007, a 49 millones 800 soles en el 2014. Es decir en menos de 9 años, el estado le ha pagado hasta hace un mes, por contratos de limpieza, 170 millones y medio de soles.

En medio de todo esto, aparece Miguel Facundo Chinguel, el ex militante aprista, quien presidió la Comisión de Gracias Presidenciales que indultó a 85 presuntos narcotraficantes. Según se conoció a través de los medios esta semana, Chinguel no sólo habría defendido a la familia de Oropeza tras su muerte, sino que compró en Abril del 2011, gran parte de las acciones de las tres principales compañías que dejaba el difunto que valían varios millones, pero que él habría comprado en 80 mil soles. 

Según esta información, las adquisiciones todavía no se habrían inscrito en Registros Públicos por decisión de Facundo Chinguel quien cumple una pena de 17 años en el Penal de Piedras Gordas, por haber dirigido una organización ilícita que habría recibido dinero a cambio de la libertad de bandas completas de narcotraficantes.

A estas alturas, Gerald Oropeza no tiene aún orden de captura, ni tampoco impedimento de salida del país.

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