Eva Bracamonte se enfrentó a su hermano Ariel por el crimen de la madre de ambos

La Justicia absolvió del crimen de parricidio a Eva Bracamonte

Hasta que se dictó su absolución Eva Bracamonte pasó 47 meses en prisión

Luego del crimen de la empresaria Myriam Fefer sus hijos se enfrentaron en más de una oportunidad. Eva Bracamonte recibió una pena de 30  años de prisión, la cual luego fue anulada para empezar un juicio nuevo.

En ese nuevo proceso se le absolvió del crimen de parricidio y tras nueve años se determinó que no mató a su madre. Eva Bracamonte no fue senteciada, pero vivió una condena.

El 15 de agosto de 2006 Myriam Fefer fue asesinada en su casa en San Isidro, sus hijos Ariel y Eva no escucharon nada y la encontraron a la mañana siguiente. En el sepelio de la empresaria judía fue una de las última veces que los hermanos estuvieron juntos, pero la fractura vino poco después.

En el 2008 la hipótesis del homicidio por lucro circuló pronto. Con la muerte de su madre, Eva mantuvo la millonaria herencia de su abuelo. El asesino, Alejandro Trujillo Ospina, sería extraditado desde Argentina en el 2010, y se empezó a sospechar de Liliana Castro Manarelli como cómplice del asesinato.

Bracamonte y Castro se presentaron ante el juez en setiembre del 2009 y se les dictó detención. Ambas acabaron en el penal de Chorrillos, en medio de las más temidas delincuentes femeninas, entre ellas terroristas.

El juicio enfrentó a Eva y Ariel. Ella desde la defensa, él desde el ataque, más de uno vio en ellos a Caín y Abel. En la antesala a la sentencia Bracamonte y Castro obtuvieron arresto domiciliario, un mes después durante la lectura de la sentencia Eva sufrió convulsiones, era octubre de 2012.

Tres dias después Eva Bracamonte fue condenada a 30 años de prisión, mientras que Castro fue absuelta. El autor material recibió 35 años de pena. Sin embargo, racamonte planteó la anulación, un año después, en setiembre de 2013, se dispuso su libertad y el inicio de un nuevo juicio,

Hasta que se dictó su absolución Bracamonte pasó 47 meses en prisión por un crimen que la justicia determinó no cometió. ¿Cuánta justicia hubo? Una pregunta que nunca se podrá resolver, pues acabó pagando por algo que no hizo.

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