Asilo político: ¿Qué continúa tras la confirmación de la prerrogativa en favor de Lilia Paredes?

El excanciller Eduardo Ferrero señaló que Perú tiene la decisión de darle o no el salvo conducto a la esposa de Pedro Castillo para que abandone el país

Ferrero indicó que esta decisión complica la situación legal de Pedro Castillo / Foto: Archivo El Comercio

El Ministerio de Relaciones Exteriores de México confirmó que Lilia Paredes, esposa de Pedro Castillo, ya cuenta con asilo político y que se encuentra en la embajada de su país en Perú. Ante ello el excanciller peruano Eduardo Ferrero explicó qué continúa en este proceso.

“Conforme al Derecho Internacional, han pedido el salvo conducto para que Lilia Paredes pueda salir de la sede diplomática, acompañada del embajador mexicano, en un vehículo de la embajada e ir a un punto fronterizo, como el aeropuerto y tomar su vuelo. La norma está en nuestra Constitución”, explicó Ferrero a Canal N.

Además señaló que es el Estado Peruano el titular de otorgar o no dicho salvo conducto, para que la esposa de Pedro Castillo pueda dejar la Embajada de México en Perú y abandonar el país.

“Si no da el salvo conducto, simplemente no puede salir de la embajada, porque si sale puede ser detenida por las autoridades peruanas. Puede pasar meses en la embajada. Perú puede negarse a dar el salvo conducto, pero no estaría actuando de acuerdo a las normas de derecho de asilo diplomático”, dijo el excanciller.

Asimismo señaló que, en caso el Poder Judicial dicte alguna medida restrictiva como prisión preventiva o impedimento de salida del país, las autoridades peruanas no pueden ingresar a la Embajada de México pues constituye espacio extranjero.

“El Gobierno Peruano no puede ingresar a sede diplomática de México por el proceso de inviolabilidad de la embajada. Con el salvo conducto, puede tomar su avión a pesar de que existe una orden de impedimento de salida del país”, indicó.

Ferrero afirmó que esta decisión complica la situación legal de Pedro Castillo, actualmente detenido en el penal de Barbadillo.

“Es una razón más para que Pedro Castillo continúe en prisión. Este hecho enturbia más las relaciones entre ambos países. Es un asilo forzado”, afirmó.

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