Edinson Cavani cambió los botines de fútbol por las zapatillas de ballet para promover la danza entre los varones en Uruguay y derribar varios estereotipos.
"No comparto eso de que todo niño varón tiene que jugar solamente al fútbol", dijo a AFP el goleador histórico del París Saint-Germain, al contar por qué no dudó en aceptar la convocatoria para ponerle el cuerpo a una campaña que busca aumentar las inscripciones masculinas en la estatal Escuela Nacional de Formación Artística (ENFA).
"Creo que las niñas y niños tienen que ser libres de buscar su felicidad en lo que más les apasione, porque es la manera de formarlos seguros, y que día a día vayan creciendo dando pasos firmes", agregó Cavani en un mensaje vía WhatsApp desde Europa, adonde volvió luego de pasar cinco meses en su natal Salto por la pandemia de COVID-19.
Mientras el mundo del fútbol tiene los focos puestos en el uruguayo para saber dónde recalará tras su partida del PSG, el delantero olvidó los vaivenes de su futuro deportivo para calzarse las zapatillas de ballet y grabar un spot junto a bailarines profesionales que le enseñaron posiciones y movimientos clásicos.
"La experiencia fue increíble, los bailarines me explicaban cómo hacer los pasos y yo cuando los veía quedaba realmente admirado, porque la danza es algo maravilloso", relató Cavani, quien siguió las instrucciones de los profesionales durante las siete horas que estuvo en el auditorio Adela Reta para filmar la campaña, en forma totalmente honoraria.
El auditorio es la casa del Ballet Nacional del Sodre, que bajo la dirección del argentino Julio Bocca (2010-2017) se convirtió en uno de los más reconocidos de la región.
El 9 de la selección uruguaya dijo a AFP que su vínculo con esta disciplina tiene mucho que ver con su mujer, Jocelyn Burgardt, quien es licenciada en gestión cultural.
"Mi compañera de vida es apasionada por la danza (...) Por eso estando en París concurrimos a ver funciones de ballet donde la pasamos superbién y disfrutamos mucho".