Tres casos en los que te conviertes en un trabajador estable

¿Te has preguntado cómo pasas a ser un empleado indeterminado? Una abogado laboralista te explica qué situaciones se deben cumplir para ser estable en una empresa

¿En qué casos me convierto en un trabajador estable?
¿En qué casos me convierto en un trabajador estable?

Uno de los grandes objetivos de un trabajador es poder encontrar estabilidad laboral en una empresa u organización. Por ende, te presentamos tres casos en los que puedes convertirte en un empleado indeterminado.

Tres formas en las que te conviertes en trabajador estable

De acuerdo a Carolina Fernández, abogado laboralista, la primera situación gira en torno a cuando el empleador olvida renovarte el contrato de trabajo.

“Trabajas sin un contrato escrito, en realidad, tu empleador no te envió ninguna adenda, contrato escrito, prórroga, no hay nada de eso. Es el primer supuesto donde eres un trabajador indeterminado”, explica la especialista.

El segundo caso viene a darse cuando nunca tuviste un contrato escrito, simplemente continuaste trabajando y nunca firmaste un acuerdo inicial. Por lo general, se trata de trabajadores que desde el inicio son indeterminados porque el empleador así lo ha dispuesto.

Las empresas pueden tener contratos indeterminados para puestos gerenciales.
Las empresas pueden tener contratos indeterminados para puestos gerenciales.

Fernández recomienda a las empresas que siempre tengan contratos indeterminados para puestos gerenciales, por ejemplo, ya que son cargos medulares y no necesitan ser renovados periódicamente.

Finalmente, la tercera situación se basa en aquel trabajador que tiene más de cinco años en una empresa, por lo que se entiende que es estable. También se puede dar en empleados que tienen contratos de inicio incremento de actividad pasados los tres años.

“También un contrato que puede ser de temporada. Cuando esta acabe y sigues trabajando sin contrato o puede ser también como otro contrato de recuperación empresarial pasado los dos años ya tienes que ser estable”, agrega la abogada.

Cabe resaltar que cada tipo de contrato tiene su propio plazo, así que contabilizando su duración, Fernández indica que si pasas un día más, ya serías estable. Ten en cuenta que la regla general para todos es que no pase más de cinco años. 

RELACIONADOS