Hoy:

    Jair Bolsonaro con tobillera electrónica y la amenaza de prisión

    El expresidente de Brasil denunció persecución tras mostrar su tobillera electrónica. La Corte lo amenaza con prisión.

    Foto y video: Canal N

    ¿Por qué Bolsonaro lleva una tobillera electrónica?

    El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue obligado por orden judicial a portar una tobillera electrónica como parte de una serie de medidas cautelares impuestas por el Supremo Tribunal Federal (STF). La decisión responde a una investigación por intento de golpe de Estado en 2022, cuando habría buscado impedir la toma de mando de Luiz Inácio Lula da Silva.

    La medida busca monitorear sus movimientos y asegurar que cumpla con otras restricciones: no usar redes sociales, no dar entrevistas para ser difundidas digitalmente, no acercarse a embajadas ni a representantes extranjeros, y permanecer en su domicilio por las noches y fines de semana.

    ¿Qué hizo Bolsonaro al respecto?

    El lunes, Bolsonaro apareció ante las cámaras en el Congreso de Brasil para mostrar su tobillera electrónica. Arropado por sus seguidores, calificó la decisión judicial como “la máxima humillación” y denunció que es víctima de una persecución política. Afirmó que está siendo atacado por su ideología y que su única ley es “la de Dios”.

    Aunque evitó transmitir directamente su mensaje por redes sociales, sus hijos, aliados y varios medios difundieron el discurso. Esa difusión provocó una dura advertencia judicial.

    ¿Por qué podría ir a prisión?

    El juez Alexandre de Moraes, del STF, consideró que la difusión del discurso, aunque no fue desde sus cuentas oficiales, viola las restricciones impuestas. Sostuvo que el exmandatario está usando a terceros para burlar las medidas. Exigió a sus abogados que respondan en 24 horas, o de lo contrario, se ordenará su prisión inmediata.

    La Corte Suprema confirmó la advertencia en una sesión virtual que terminó la medianoche del lunes, con cuatro votos a favor y uno en contra.

    ¿Cuál fue la reacción política en Brasil?

    Diputados y senadores del Partido Liberal de Bolsonaro rechazaron la advertencia judicial y la calificaron como un acto de censura. “Otra orden de silencio”, dijo el congresista Sóstenes Cavalcante, quien lidera la bancada bolsonarista en la Cámara Baja.

    Para sus seguidores, las medidas impuestas al expresidente son una forma de neutralizar su participación política en un contexto electoral clave. Para sus críticos, en cambio, se trata de una acción necesaria para frenar la desinformación y evitar nuevos intentos de desestabilización.

    ¿Por qué se acusa a Bolsonaro de intentar un golpe de Estado?

    La investigación sostiene que Bolsonaro intentó evitar la juramentación de Lula en 2022, presionando a las Fuerzas Armadas e intentando movilizar apoyo internacional, en particular del expresidente estadounidense Donald Trump.

    El caso incluye sospechas de manipulación mediática, uso de terceros para difundir mensajes y una estrategia de victimización pública. El juez Moraes indicó que hay indicios de que Bolsonaro y su entorno intentan someter al sistema judicial brasileño a la presión internacional.

    ¿Qué ha dicho Donald Trump sobre el caso?

    El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, intervino indirectamente en el conflicto al anunciar un aumento del 50% en los aranceles a las exportaciones brasileñas desde agosto. Justificó la medida como una respuesta a lo que calificó como “caza de brujas” contra su aliado político.

    Trump exigió que el juicio contra Bolsonaro se cierre de inmediato y acusó al gobierno de Lula de intentar silenciar a la oposición. Este gesto ha tensado las relaciones entre Brasil y Estados Unidos.

    ¿Cómo respondió el gobierno brasileño a las acciones de Trump?

    El gobierno de Lula no ha emitido una respuesta oficial directa, pero ha dejado claro su rechazo a cualquier forma de presión externa. Funcionarios cercanos al presidente calificaron los aranceles como “chantaje comercial” y aseguraron que el sistema judicial actúa con independencia.

    La controversia ha abierto un nuevo frente diplomático, mientras el juicio contra Bolsonaro sigue su curso. Expertos advierten que este conflicto podría escalar si EE.UU. insiste en condicionar sus relaciones comerciales al resultado del proceso judicial.

    ¿Qué hace Eduardo Bolsonaro desde Estados Unidos?

    Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente, renunció a su cargo en el Congreso brasileño en marzo y se trasladó a Estados Unidos. Desde allí, ha liderado una campaña para que sectores conservadores de ese país, incluyendo a Trump, intercedan por su padre.

    Según el juez Moraes, esto forma parte de una estrategia para internacionalizar el conflicto judicial y presionar políticamente a la Corte Suprema de Brasil. También se han difundido mensajes en redes en defensa de Bolsonaro desde cuentas asociadas a figuras del bolsonarismo.

    ¿Qué más podría pasar si Bolsonaro vuelve a incumplir?

    La advertencia del STF es clara: una nueva infracción puede llevar a su arresto inmediato. Sería la primera vez que un expresidente brasileño es encarcelado por violar medidas cautelares relacionadas con un juicio por golpe de Estado. El riesgo legal de Bolsonaro es alto, y su equipo evalúa acciones ante organismos internacionales.

    Mientras tanto, el exmandatario sigue en Brasil, con el dispositivo de monitoreo activo y bajo vigilancia judicial. No se ha descartado una solicitud de refugio internacional si la situación escala, aunque él ha negado querer huir.

    ¿Cómo se vive este caso en la población brasileña?

    La figura de Bolsonaro continúa polarizando a Brasil. En redes sociales y en medios locales, el tema ha generado un debate profundo sobre los límites entre justicia, política y libertad de expresión. Algunos ciudadanos lo apoyan como un símbolo de resistencia contra el “sistema”, mientras otros exigen que rinda cuentas ante la justicia.

    El proceso se ha convertido en uno de los casos judiciales más mediáticos del país, con implicancias políticas, institucionales y diplomáticas que podrían extenderse más allá de sus fronteras.

    Jair Bolsonaro, con tobillera electrónica impuesta por la Corte Suprema de Brasil, enfrenta una posible prisión inmediata por violar restricciones judiciales. La difusión indirecta de su discurso en redes ha generado una advertencia formal. El caso ha provocado tensión interna y un conflicto diplomático con Estados Unidos, donde Donald Trump lo ha defendido con medidas comerciales.