Venden productos rescatados del mar tras caída de contenedores

Ancón se ha convertido en escenario de un inusual comercio. Tras la caída de contenedores al mar, en el estacionamiento del distrito ha surgido un mercadillo improvisado donde se venden productos recuperados directamente del mar. La mayoría son artículos de belleza, maniquíes y dispensadores que originalmente estaban destinados a negocios.

Los vendedores aseguran que los productos están “regalados”. Algunos fardos se ofrecen desde cinco soles, y los compradores llegan desde temprano para aprovechar los precios bajos. “Todo esto estaba en los contenedores. Lo hemos rescatado del mar, limpiado y ahora lo estamos vendiendo”, comentó una de las vendedoras.

Las ventas se realizan sin regulación alguna. Varias personas se llevan productos por volumen, como cabezales para prácticas de corte, bancas plásticas y dispensadores de baño. Algunos compradores afirmaron haber llenado taxis enteros con lo adquirido para revenderlo en otras zonas.

¿Qué tipo de productos se venden tras el accidente?

Entre los artículos más comunes se encuentran implementos de barbería, cabezas de maniquí para prácticas de trenzado, dispensadores de alcohol, bancos de plástico y hasta accesorios para salones de belleza. Todo ello fue rescatado del mar luego de que varios contenedores cayeran accidentalmente días atrás.

Los vendedores señalan que han recuperado pocos fardos, pero en los primeros días del incidente hubo más movimiento y mayores volúmenes de mercancía. “Esta es la segunda vez que cargo el taxi con productos. Es barato y se vende rápido”, contó una compradora.

¿Qué consecuencias ha dejado en el medio ambiente?

El otro lado de la historia preocupa a los vecinos y visitantes: la contaminación en la costa. Se reportó que los residuos del embalaje, especialmente tecnopor, han quedado varados en la arena y flotando en el mar.

Vecinos aseguran que Ancón y otras playas como Conchitas también se han visto afectadas. Ante esta situación, hacen un llamado a las autoridades ambientales y municipales para intervenir, ya que la acumulación de residuos podría generar un nuevo problema ecológico.

La comunidad recuerda con preocupación el derrame de petróleo que afectó Ancón hace unos años, y ahora teme que los restos de tecnopor y otros materiales plásticos dañen nuevamente el ecosistema costero.

Mientras continúa la venta informal de productos rescatados del mar, también crece la urgencia de limpiar las playas y evitar que el impacto ambiental se agrave.