Municipalidad modernizará mercado La Parada en su integridad

La Municipalidad de Lima anunció el inicio de un ambicioso proyecto para la modernización total del mercado La Parada, uno de los principales centros de abasto minorista de la capital. Según indicó la entidad a través de Emape, las obras comenzarían en diciembre de 2025 y contemplan una inversión de S/ 350 millones para reconstruir por completo la infraestructura actual, ubicada en el distrito de La Victoria.

Durante años, este mercado ha sido asociado con el desorden, la informalidad comercial, la inseguridad y serios problemas estructurales que afectan tanto a los comerciantes como a los usuarios. El nuevo plan apunta a transformar completamente ese escenario y recuperar el orden en una zona crítica para el comercio limeño.

¿Qué contempla el nuevo mercado La Parada?

El proyecto de modernización del mercado minorista N°1 La Parada considera una edificación de dos niveles, donde se ubicarán 2700 puestos de venta distribuidos de manera ordenada y con condiciones sanitarias adecuadas. Además, se construirá una torre de seis pisos destinada a estacionamientos, zonas de embarque y desembarque, así como accesos diferenciados para usuarios y proveedores.

Todo esto estará alineado con la normativa vigente en materia de mercados municipales, lo que incluye sistemas de ventilación, seguridad estructural y servicios básicos. La propuesta busca mejorar no solo la infraestructura interna, sino también su impacto en el entorno, históricamente afectado por la congestión, el comercio informal y la falta de planificación urbana.

Reubicación temporal y continuidad comercial en La Parada

Para no detener la actividad económica mientras se desarrollan las obras, la Municipalidad de Lima ha dispuesto una reubicación temporal de los comerciantes al Parque del Migrante. Esta medida permitirá mantener la atención al público y proteger los ingresos de los vendedores durante el proceso de reconstrucción.

Emape precisó que la reubicación será organizada y coordinada con los gremios involucrados, a fin de garantizar que todos los comerciantes puedan continuar trabajando sin interrupciones. También se han considerado facilidades logísticas en este espacio provisional, como servicios higiénicos, seguridad y acceso vehicular.

Precio de los puestos genera rechazo entre comerciantes

Uno de los puntos que ha generado mayor controversia entre los comerciantes es el modelo de financiamiento. La municipalidad ha establecido que el precio por metro cuadrado será de USD 7,000, con facilidades de pago durante la primera etapa. No obstante, si no se logra colocar la totalidad de los puestos, se implementará un mecanismo de subasta para los espacios restantes.

Este esquema ha sido rechazado por una mayoría significativa de comerciantes. Voceros gremiales señalaron que más del 90 % de los vendedores no está en condiciones económicas para asumir ese costo. “No estamos en capacidad de comprar los puestos bajo esos términos. Lo consideramos injusto”, declaró uno de los comerciantes.

Comerciantes temen ser excluidos del nuevo mercado La Parada

La preocupación principal de los gremios es que el modelo propuesto podría llevar a la exclusión de los comerciantes tradicionales, que llevan años trabajando en La Parada. Temen que la venta priorice criterios económicos por encima de la trayectoria o el arraigo en la zona, y han solicitado garantías que aseguren su retorno al nuevo espacio.

Algunos representantes manifestaron que la modernización es necesaria, pero no puede hacerse sin diálogo ni consenso con los directamente afectados. “Queremos un mercado moderno, pero también queremos seguir siendo parte de él”, indicaron.

Un megaproyecto con retos por resolver

Pese a la presentación oficial del proyecto, su ejecución dependerá del consenso con los beneficiarios. La Municipalidad de Lima ha señalado que mantiene abiertas las puertas al diálogo con los gremios para afinar detalles y evitar conflictos durante el proceso.

De concretarse, el nuevo mercado de La Parada se convertiría en uno de los más grandes y modernos del país, marcando un hito en la reordenación del comercio urbano limeño. Sin embargo, el éxito del plan estará condicionado a su capacidad de incluir a los actores históricos del mercado, y de asegurar condiciones equitativas para todos los involucrados.