Carlos Malaver: octavo titular del Interior en menos de 3 años
Carlos Malaver asumió como octavo ministro del Interior en esta gestión. Fue nombrado tras reuniones privadas con Juan José Santiváñez en Palacio
Antes de su juramentación como nuevo ministro del Interior, el general PNP en retiro Carlos Malaver se reunió por casi tres horas con Juan José Santivañez en su oficina en Palacio de Gobierno. Video: Canal N
Carlos Alberto Malaver Odías fue designado como nuevo ministro del Interior el 13 de mayo. Tiene 60 años, es general en retiro de la Policía Nacional del Perú y es el octavo titular del sector durante el actual gobierno. Su nombramiento se produjo tras dos reuniones en Palacio con Juan José Santiváñez, actual funcionario de la Presidencia y exministro del Interior.
En solo 48 horas, pasó de visitar oficinas del Despacho Presidencial a jurar el cargo, evidenciando que su llegada al puesto fue parte de una decisión tomada desde el núcleo cercano del Ejecutivo.
Malaver tiene 35 años de experiencia en la Policía. Fue jefe de la macro región Piura, lideró la División de Trata de Personas y estuvo a cargo de la Dirección de Inteligencia.
¿Qué se sabe de sus reuniones en Palacio?
El 12 de mayo, Malaver visitó a Santiváñez entre las 6:09 p.m. y las 9:10 p.m. en Palacio. Al día siguiente volvió a ingresar y, horas después, fue juramentado como nuevo ministro del Interior.
Estas reuniones se dan en un contexto en que el Ministerio del Interior ha sufrido múltiples cambios. En menos de tres años de gestión ya han pasado ocho ministros por esta cartera.
Malaver reemplaza a Julio Díaz Zulueta, quien ocupó el cargo brevemente tras la salida de Santiváñez.
¿Cuáles son sus retos como nuevo ministro del Interior?
La inseguridad ciudadana es uno de los problemas más graves que enfrenta el país. Según el SINADEF, más de 800 asesinatos se han registrado solo en lo que va de 2025.
Malaver deberá tomar decisiones rápidas y efectivas. La ciudadanía exige una estrategia clara frente al crimen organizado, la extorsión y el sicariato. Además, tendrá que estabilizar una institución desgastada por los constantes cambios en su dirección.
La pregunta es si logrará mantenerse en el cargo lo suficiente como para ejecutar algún plan sostenido.
