Paolo Guerrero: Identifican a presuntos extorsionadores que amenazaron a 'doña Peta'

Amenazaban a los trujillanos, todo gran empresario o famoso que llegue a esa ciudad debía alinearse a su consigna criminal: cupo o muerte. Tenían en la mira al jugador de fútbol Paolo Guerrero, pidiéndole a su madre Petronila González miles de soles para dejarlo jugar con tranquilidad en Trujillo y no atentar contra los suyos.

Alias Cabezón Moya, China Gina y Orejón serían 'Los Cachacos de Yolin', según la policía, una facción de la organización criminal Los Pulpos, que vienen sembrando la extorsión, sicariato y secuestros desde hace décadas entrelazando con sus escurridizos tentáculos a cada persona en la zona norte de nuestro país.

Cayeron cuando dejaban una dinamita en la casa de un empresario en la urbanización El Golf. La División de Investigación Criminal de Trujillo les atribuye varios atentados y amenazas, entre sus víctimas la madre del 'depredador'. Y es que los siniestros mensajes salieron del mismo número telefónico, tanto en el caso del empresario como del futbolista.

Edwin Moya Salazar, alias Cabezón Moya, es sindicado por las autoridades trujillanas de ser el emisario de la muerte, quien designaba los crímenes, pero la mente sanguinaria que controlaría esta organización es un peligroso delincuente conocido en el mundo del hampa como Yolin.

Diego Mendoza Alvarado y Geraldine Chunga Timoteo, ambos de 22 años, habrían sido los encargados de cumplir las oscuras órdenes de Yolin para exigir tributos bajo despiadadas amenazas. Los montos que pedían oscilaban en más de 100 mil soles.

En la sombra del chantaje los comanda Jonson Cruz Torres y su banda Los Pulpos Nueva Generación, quienes tienen en zozobra a Trujillo hace más de dos décadas. Todo lo opera desde Santiago de Chile.

Un círculo vicioso de cuantiosas cifras impagables que no tenían cuando acabar. Aún son desconocidas las razones, por las cuales el Ministerio Público decidió dejar en libertad a Geraldine Chunga Timoteo, mientras alias Cabezón y Orejas cumplirán 9 meses de prisión preventiva.

Y es que estas extorsiones casi acaban con la ilusión de todo el pueblo trujillano que soñaba ver a Paolo Guerrero jugar para el equipo poeta, pues el mismo día que el goleador histórico de la selección firmó por el club de la universidad Cesar Vallejo, doña Peta, recibió los mensajes extorsivos.

Tras la captura de quienes serían sus extorsionadores, será el destino de Paolo Guerrero confiar en que no llegarán más amenazas que pongan en riesgo su vida y la de toda su familia, serán Los Pulpos sus mas grandes enemigos.