Ataque israelí contra televisión estatal de Irán

La televisión estatal de Irán fue blanco de un bombardeo israelí este lunes, justo cuando transmitía un programa en vivo desde su sede en Teherán. La explosión interrumpió la señal y provocó que la presentadora abandonara el set.

Según medios iraníes, el hecho ocurrió mientras se emitían críticas contra Israel. Las imágenes del ataque fueron difundidas por redes y medios locales. Minutos después, la cadena estatal IRIB logró retomar su transmisión.

El ataque sorprendió a los ciudadanos de Teherán, especialmente a quienes viven en el tercer distrito, un barrio donde también se encuentran hospitales, embajadas, y oficinas de medios internacionales.

¿Por qué bombardeó Israel la sede de IRIB?

Antes del ataque, el ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, había advertido que los medios estatales iraníes estaban “a punto de desaparecer”. Además, el ejército israelí llamó a evacuar el área donde se ubica IRIB.

El portavoz militar israelí, coronel Avichay Adraee, anunció que en las próximas horas realizarían operaciones contra “infraestructuras militares del régimen iraní” en esa zona. La alerta se extendió a toda la población cercana.

Este tipo de mensajes incrementó la tensión en Teherán, y muchas personas abandonaron sus hogares ante el temor de nuevos ataques.

¿Qué otras zonas de Teherán fueron afectadas?

Además de la sede de IRIB, se escucharon explosiones en el oeste de la capital iraní, según reportó un periodista de AFP. Las autoridades no han informado sobre víctimas ni daños materiales en otras zonas.

La zona atacada también alberga la oficina de la Organización Internacional para las Migraciones, edificios de la policía y varias representaciones diplomáticas.

¿Cómo reaccionaron las autoridades iraníes?

Hassan Abedini, alto funcionario de la televisora, aseguró que “la voz del gran Irán no será silenciada” tras el bombardeo. Aunque el gobierno iraní aún no se ha pronunciado oficialmente, se espera una respuesta en las próximas horas.

Este ataque en plena capital iraní ha generado preocupación entre los ciudadanos, que temen un aumento de las hostilidades en medio del ya tenso escenario regional.