Trujillo vibró con el Gran Corso de la Primavera

Las calles de Trujillo se llenaron de color y alegría este domingo 28 de septiembre con el Gran Corso Internacional de Primavera 2025, que marcó el fin de una semana llena de cultura, arte y tradición. Fue el evento central del 73° Festival Internacional de la Primavera, y reunió a miles de personas que disfrutaron del desfile con entusiasmo.

En total, participaron 123 delegaciones entre carros alegóricos, comparsas artísticas, bastoneras y representantes de diversos países. Las reinas de belleza de Estados Unidos, México, Paraguay y Panamá se unieron a esta celebración, aportando su presencia internacional al evento.

¿Cómo fue la ruta del corso y quién lo encabezó?

El recorrido comenzó en la intersección de las avenidas España y Vera Enríquez, continuó por la avenida España, pasó por la calle Juan Pablo II y culminó en la avenida América Sur. Durante el trayecto, familias enteras se apostaron en las veredas para aplaudir y tomarse fotos con los participantes.

La Reina del Festival, Valeria Maza Escobal, desfiló en un carro alegórico que representó la esencia de Trujillo. Bastoneras extranjeras, grupos folclóricos y bandas de música escolar se unieron al desfile para brindar un espectáculo lleno de ritmo y color.

¿Qué actividades acompañaron esta semana festiva?

El corso fue el broche final de una semana intensa de actividades del festival, que incluyó acciones solidarias, circuitos gastronómicos, pasacalles culturales, presentaciones de música y danzas, y visitas protocolares de las delegaciones extranjeras.

Cada número del desfile reflejó el trabajo conjunto de artistas, estudiantes, autoridades y vecinos, quienes colaboraron para que esta edición del festival sea inolvidable.

¿Qué significa este festival para Trujillo?

Para muchos trujillanos, este evento es un símbolo de identidad y orgullo regional. La participación activa de delegaciones nacionales e internacionales muestra el valor cultural y turístico que tiene Trujillo en el Perú y el mundo.

Con el Gran Corso, la ciudad no solo celebra la llegada de la primavera, sino también su capacidad de acoger y mostrar lo mejor de sus tradiciones a propios y visitantes.