Sismo de 6.1 alerta: 69% de viviendas en Lima son informales
Lourdes Giusti, decana del Colegio de Arquitectos, advierte alto riesgo en zonas construidas sin apoyo técnico.
Según Lourdes Giusti, decana del Colegio de Arquitectos del Perú, el reciente movimiento sísmico del domingo dejó en evidencia lo frágiles que son muchas de nuestras viviendas. “El 69% de las casas en Lima son autoconstruidas, es decir, hechas sin apoyo profesional”, señaló. Eso significa que una gran parte de la ciudad vive en estructuras que no están preparadas para resistir un sismo fuerte.
¿Y cuántas de esas casas son realmente peligrosas?
El dato más alarmante lo dio la misma Giusti: de todas las viviendas autoconstruidas, un 24% son consideradas “muy precarias”. Esto quiere decir que tienen altas probabilidades de colapsar si ocurre un sismo mayor. “Estamos hablando de 1.6 millones de viviendas con riesgo real de caerse”, advirtió la decana.
¿Por qué tanta gente vive así?
Giusti fue clara: el problema no es la gente, es el Estado. “No se ha dado una solución de vivienda real a los sectores más pobres”, explicó. A falta de alternativas, miles de familias levantan sus casas como pueden, en terrenos inestables, con materiales que no siempre son seguros. Además, hasta 2021 el Perú no tenía una política nacional de vivienda, a diferencia de países vecinos como Chile o Colombia.
¿Qué zonas de Lima son las más riesgosas?
Las más expuestas, según Giusti, son las viviendas construidas en laderas y suelos arenosos, como en Villa María del Triunfo o similares. En estas áreas, los terrenos no están preparados y muchas veces no hay cimientos firmes. “Son zonas donde el riesgo de colapso es altísimo”, alertó.
¿La Costa Verde también es peligrosa?
Sí, pero en menor medida. La decana explicó que, si bien hay edificaciones en la Costa Verde con estudios técnicos adecuados, también existen construcciones al borde del acantilado que preocupan. “Hay zonas vulnerables. No se puede descartar el riesgo”, afirmó.
¿Qué se está haciendo desde el urbanismo?
Poco, lamentablemente. Giusti explicó que la Ley de Desarrollo Urbano Sostenible recién fue aprobada en 2021 y aún no se aplica de forma eficaz. “Si no hay planificación, seguiremos construyendo mal y en zonas inadecuadas”, concluyó.














