El papa Francisco conversó sobre su visita a Chile y Perú durante el viaje

Indicó que ha estado dos tres veces antes en el Perú, pero para congresos o encuentros religiosos

Papa Francisco. Foto: Agencia Andina

El avión papal tiene tres divisiones. En la parte delantera está el papa Francisco con sus colaboradores más cercanos, en el centro están los guardias y en la parte final los reporteros. Hay algo más de 100 personas, entre ellos 70 reporteros. 

Durante el viaje, el Papa recordó que el vuelo entre Roma y Santiago de Chile es el vuelo directo más largo que tiene la compañía Alitalia. Indicó que es un vuelo que cansa porque es aburrido y propuso trabajar y descansar durante el viaje.

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El papa Francisco estuvo muy contento y lucía muy relajado en el avión, donde conversó con periodistas y recordó que hay estado 2 o 3 veces en el Perú y que conoce Chile un poco mejor porque vivió allí un año y medio.

"Para mí no será tan difícil en Chile porque he estudiado ahí, tengo muchos amigos, lo conozco bien, bueno maso o menos bien. Sin embargo, conozco menos Perú, ahí he ido 2 o 3 veces para congresos o encuentros”, precisó. 

Cada uno de los 70 reporteros que viajaron con el Papa recibió una fotografía muy triste del día después de la explosión de la bomba atómica de Nagasaki. Detrás, el Papa escribió que se trata del fruto de la guerra.

"La hicieron (la fotografía) en 1945, detrás estan los datos. Es un niño que lleva a su hermanito a espaldas, a su hermanito muerto. Esperan el turno del crematorio en Nagasaki, el día después de la bomba. Me conmoví cuando la vi y me atreví solo a escribir ‘El fruto de la guerra’. Hice que se imprima y se distribuyera porque una imagen así conmueve más que mil palabras. Esto he querido compartir con ustedes”, explicó el Sumo Pontífice. 

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De las 16 horas que duró el vuelo, Francisco estuvo una saludando a los periodistas. Uno de ellos le preguntó si tiene miedo a una posible guerra nuclear, a lo que respondió que sí porque sería suficiente un accidente para que la situación se precipite. 

Francisco también bendijo fotografías de los familiares de los reporteros, rosarios y objetos religiosos. Su avión sobrevoló una decena de países, entre ellos Argentina. El Papa pudo ver de nuevo a su Patria desde el cielo y desde allí envió un cariño mensaje a sus compatriotas. 

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