Cuando el coronel PNP Harvey Colchado y el equipo de fiscales dirigido por Marita Barreto ejecutaban el primer gran golpe judicial contra la entonces fiscal de la Nación Patricia Benavides, vino la sorpresa de oficinas que, evidentemente, habían sido manipuladas antes del operativo que se suponía era secreto.
Con todo y su experiencia, el coronel Colchado aquí no sabía que uno de sus mejores hombres lo había traicionado.
Horas antes de esta operación, Patricia Benavides y su equipo ya sabían lo que iba a suceder gracias a que el capitán de la policía Jorge Rodríguez Menacho les había advertido que iban a ser allanados y que Villanueva sería detenido.
La tarde y noche del domingo 26 de noviembre del año pasado, la fiscal Marita Barreto y el coronel Colchado coordinaban en secreto los pormenores de la primera operación Valquiria. A esta oficina fue llamado en consulta uno de los mejores policías de la DIVIAC: el capitán Rodríguez Menacho, experto en el manejo del sistema CelleBrite de extracción de contenido de celulares. Quién imaginaría que el capitán iba escuchando e iba poniendo en sobre aviso a los miembros de la presunta organización criminal.
La caída de un policía en actividad que hoy está en calidad de detenido ha sido un golpe para la moral del equipo policial al que pertenecía.
