Banquetes en Palacio: así se gasta la caja chica presidencial
Cada miércoles, el Consejo de Ministros se reúne y la caja chica del despacho presidencial cubre refrigerios, postres y pedidos especiales con fondos públicos
Mientras el país enfrenta crisis de seguridad, conflictos sociales y emergencias ambientales, en Palacio de Gobierno hay algo que no cambia: los banquetes. Semana a semana, cada sesión del Consejo de Ministros llega acompañada de refrigerios, almuerzos y postres. Todo costeado con dinero público, a través de la caja chica del despacho presidencial.
Cuarto Poder accedió a documentos oficiales que revelan los detalles. Se trata de facturas, boletas y solicitudes que muestran cómo, con regularidad, se gasta entre mil y dos mil soles por sesión para atender los gustos culinarios de la presidenta Dina Boluarte y sus ministros.
Emergencias afuera, postres adentro
El 25 de septiembre de 2024, el gabinete se reunió en el COEN en plena emergencia por incendios forestales. Ese día, el refrigerio incluyó pan, jamón, frutas y gaseosas por 688 soles. No fue suficiente. A las 2:14 p.m., se pidió una segunda ronda: empanadas, alfajores y brownies por 747 soles más. El gasto total en alimentación superó los 1,400 soles.
Cinco días después, en otra sesión, se compraron insumos por 881 soles. A la 1:00 p.m., volvieron a pedir: pollo a la brasa por 719 soles. Al día siguiente, cambiaron de antojo: comida china. Dos facturas registran chaufa especial y chancho al tamarindo. Costo: casi mil soles.
Dina Boluarte ha declarado públicamente que "con 10 soles las mujeres hacemos sopa y postre". Pero los documentos revelan lo contrario.
Chicharrones, lomo fino y tortas tres leches
En enero de 2023, durante las protestas más intensas contra el gobierno, se compraron 30 porciones de chicharrón por 597 soles. Días después, se pidieron 35 más. Ese mismo 20 de enero, también se registraron compras en dos pollerías: el gasto en pollo a la brasa alcanzó los 1,383 soles.
En diciembre, cuando se denunció que escolares recibían conservas con carne de caballo, el gabinete almorzó lomo fino. Solo ese ingrediente costó 552 soles. La lista del día también incluyó jamón inglés, panes especiales y gaseosas, sumando casi mil soles.
Y no faltaron los postres. El 16 de octubre se compraron dulces por 174 soles. El 18 de diciembre, una torta de guanábana. En marzo, dos tortas tres leches acompañaron otra sesión ministerial. El ex premier Gustavo Adrianzén apareció luego, frente a cámaras, limpiándose los labios antes de iniciar la conferencia.
Austeridad en el discurso, banquete en la práctica
José Trelles, abogado experto en contrataciones del Estado, advierte que la caja chica debe usarse para emergencias, no para comprar almuerzos planificados. "Esto desvirtúa totalmente su finalidad", señala.
Mientras se anuncia austeridad y control del gasto, cada sesión del Consejo de Ministros muestra otra realidad. Los gastos no se canalizan por órdenes de servicio, sino por la caja chica, usada como fondo paralelo para atender antojos semanales.
Así, entre decisiones de Estado y conferencias, los miércoles en Palacio tienen un menú propio. La comida llega en motorizados, en bolsas, en fuentes, directo al corazón del poder. Una rutina costosa pagada con el dinero de todos.
Consejo de Ministros se pronuncia
El Consejo de Ministros emitió un comunicado en el que afirma que, desde febrero de este año, los almuerzos durante las sesiones ya no son financiados con dinero público. Añaden que todos los consumos previos cuentan con sustento documentario y están sujetos a control.














