Ancón: Detonan explosivo en la puerta de minimarket

Un grupo de delincuentes detonó un artefacto explosivo en la puerta de un minimarket en Ancón mientras el local se encontraba atendiendo al público. El ataque ocurrió luego de que los propietarios recibieran una serie de mensajes extorsivos en los que se les exigía el pago de cupos para no atentar contra la vida de sus familiares y trabajadores.

¿Cómo ocurrió el ataque con explosivos en el establecimiento?

El fuerte estallido se produjo en un local ubicado en la avenida Florida, generando terror inmediato entre los presentes. Según indicaron los testigos, el estallido fue tan intenso que los pasajeros de una unidad de transporte público que circulaba por la zona bajaron corriendo del vehículo para ponerse a buen recaudo tras el sonido estridente.

Cámaras de seguridad del establecimiento registraron el momento exacto en que dos sujetos a bordo de una motocicleta llegaron al lugar para ejecutar el atentado. Uno de los delincuentes descendió de la unidad y, mientras caminaba hacia la entrada, sacó un explosivo de su pantalón y lo encendió a plena vista de un joven que revisaba su celular cerca de la puerta.

Segundos después de arrojar el artefacto, el delincuente corrió hacia su cómplice para emprender la huida en la motocicleta con rumbo desconocido. La explosión ocurrió apenas unos instantes después del lanzamiento, dejando daños materiales en la fachada del negocio y un profundo temor en los vecinos de esta zona de Ancón.

¿Qué amenazas recibieron los dueños del minimarket en Ancón?

Los propietarios de este minimarket en Ancón informaron que las amenazas se intensificaron durante la mañana del martes previo al ataque. Según relataron los familiares de las víctimas, a las 11:39 a. m. recibieron mensajes de texto donde los criminales les indicaban que debían "alinearse" y entregar una suma de dinero para evitar un atentado contra su local comercial.

En los mensajes recibidos, los delincuentes aseguraron que asesinarían a los familiares de los emprendedores si no cumplían con sus demandas económicas. Un familiar señaló que, a pesar del peligro, un suboficial de la Depincri de Ancón se habría negado inicialmente a aceptar la denuncia bajo el argumento de que en los mensajes no se especificaba un monto exacto de dinero solicitado por los extorsionadores.

Tras la insistencia de los afectados, la denuncia fue finalmente procesada en la comisaría del sector y luego trasladada a la sede de la Dirincri en el Rímac. Actualmente, la División de Extorsiones cuenta con las grabaciones de vigilancia y los mensajes de texto para iniciar las investigaciones oficiales que permitan capturar a los responsables del atentado contra el minimarket en Ancón.