Alias Neto: sicario adolescente liberado tras crimen en galería

A plena luz del día, dentro de una galería en el corazón del Callao, un adolescente de apenas 16 años ejecutó a un comerciante de celulares. Se llamaba Christian Villalba Barturen y tenía 48 años. El menor, conocido como alias Neto, no lo conocía. No había rencilla previa, ni ajuste personal. Solo una orden, una cifra y un objetivo.

Por 2,000 soles, caminó decidido por los pasillos del centro comercial Polvos Chalacos, disparó una vez y, cuando la víctima cayó, lo remató sin vacilaciones. Luego escapó. El crimen fue grabado por cámaras de seguridad.

Neto fue identificado poco después, capturado y puesto a disposición de las autoridades. Pero, por ser menor de edad, fue liberado. No volvió a prisión.

Durante seis meses, se mantuvo oculto en una vivienda del jirón Loreto. En ese periodo, nunca dejó de operar. Grabó videos, vendió armas y pactó encargos.

Cuando fue recapturado, caminaba tranquilo por una calle del Callao, como si nada hubiera pasado.

¿Cómo se ejecutó el crimen en la galería?

Ocurrió el 23 de abril. Las cámaras muestran a un vehículo gris que deja a Neto a pocas cuadras del centro comercial.

Camina decidido, cruza la calle, entra al local. Ya había identificado a su víctima: un comerciante que reparaba celulares. Sube al segundo piso, regresa, se aproxima y dispara.

El disparo no fue al azar. Sabía a quién buscaba. El comerciante cae herido. Neto se acerca y lo remata. Luego huye por la misma ruta por donde ingresó. Todo dura segundos.

¿Qué ocurrió tras su primera detención?

Poco después del asesinato, la Policía lo detuvo. Alias Neto fue capturado y llevado a declarar. En sus propias palabras, confesó el crimen y reveló detalles del arma usada: un revólver con el que efectuó dos disparos.

Sin embargo, fue liberado. La ley vigente en ese momento no permitía su reclusión inmediata, por lo que recibió comparecencia simple.

Esa decisión le permitió desaparecer. Durante seis meses no se supo de él. Cambió de apariencia, dejó de subir fotos actuales y se mantuvo fuera del radar policial.

¿Dónde estuvo oculto alias Neto?

Según información de inteligencia, Neto se escondía en una vivienda del jirón Loreto, en el Callao. Evitaba salir, usaba perfil bajo en redes y limitaba su movimiento.

Sin embargo, mantenía comunicación con su entorno delictivo.

En audios obtenidos por la Policía, se escucha al menor negociar armas, coordinar entregas y pactar salidas a provincias para cumplir “vueltas”, como llaman a los encargos criminales.

En uno de los mensajes, decía: “Me adelantas algunas monedas, y me dices pa' cuándo”.

¿Qué evidencias agravaron su situación?

Las grabaciones fueron clave. Neto usaba guantes negros para evitar que se identificaran los tatuajes en sus manos. Esa costumbre quedó registrada en cada delito.

Además, en los videos difundidos en redes sociales, hablaba abiertamente de precios por pistolas, revólveres y municiones. Mencionaba marcas, calibres y tarifas, incluso imitaba frases de narcotraficantes conocidos.

Su exposición digital, sumada al seguimiento de cámaras municipales, permitió a las autoridades ubicar su nueva ruta.

¿Cómo se produjo su recaptura?

El centro de monitoreo del Callao fue determinante. Identificaron su figura, su caminar, los detalles. Un equipo de inteligencia bloqueó las posibles salidas.

Alias Neto fue intervenido cerca de la avenida Costanera. Solo logró correr unos metros. Fue reducido sin mayor resistencia.

En la comisaría, su discurso cambió. Dijo que no había disparado, que los videos los veía su abogado. Pero en la primera detención, ya había admitido el crimen, su participación, y el motivo: un encargo pagado.

¿Qué rol cumplía dentro de la red delictiva?

Alias Neto no era un sicario ocasional. Según la Policía, tenía un rol activo dentro de una estructura criminal que operaba en la zona sur del Callao. Participaba en asesinatos, venta de armas y distribución de drogas.

En sus audios, hablaba de viajar a provincias, exigía pagos adelantados y coordinaba con otros gatilleros.

También se descubrió que planeaba salir del país, concretamente a España, junto a su pareja. El objetivo era escapar de la violencia y dejar atrás la vida que había construido desde la adolescencia.

¿Qué dicen las autoridades sobre el caso?

El general PNP Isaac Candia, jefe de la región policial del Callao, calificó a Neto como un sujeto peligroso para la sociedad. Señaló que existe una declaración del propio menor reconociendo el homicidio.

La Municipalidad del Callao también destacó que el trabajo de monitoreo y las cámaras de seguridad fueron esenciales para la recaptura.

Voceros oficiales plantean el caso como ejemplo del riesgo que representan las estructuras delictivas juveniles en zonas vulnerables del país.

¿Qué pasará con alias Neto ahora?

Alias Neto deberá permanecer en un centro juvenil de rehabilitación. Su edad impide una condena regular, pero las autoridades evalúan medidas especiales.

La interrogante sigue abierta: ¿podrá este menor reformarse, o su experiencia criminal lo transformará en un futuro cabecilla?

Mientras tanto, el Callao enfrenta un fenómeno creciente. Menores sicarios, entrenados, armados, y con estructuras que los respaldan. Una nueva generación de violencia que se esconde tras rostros juveniles.

• Alias Neto, sicario de 16 años, ejecutó a comerciante en Polvos Chalacos.
• Fue detenido, confesó el crimen y luego fue liberado por ser menor de edad.
• Estuvo oculto seis meses mientras negociaba armas y drogas por redes.
• Fue recapturado por la Policía del Callao tras cerco de inteligencia.
• En sus audios, ofrecía pistolas y revólveres desde 1,000 soles.
• Planeaba viajar a España con su pareja antes de ser detenido nuevamente.