Dos casos similares a los de la colombiana que aseguró haber trabajado para Studio Ghibli

El caso de Geraldine Fernández, la colombiana que engañó a varios medios de comunicación, streamers, e incluso una universidad al afirmar que había trabajado para Studio Ghibli en la película ‘El niño y la garza’, se viralizó en redes sociales hace unos días. Sin embargo, este no ha sido el único caso de este tipo. A continuación, te contamos dos casos similares al de Fernández.

El caso del peruano Cristhian Hova

Cristhian Hova también logró engañar a varios medios de comunicación. El peruano aseguró haber diseñado portadas para la revista The New Yorker, posters de películas de Marvel y DC Cómics, e incluso afirmó haber vendido sus ilustraciones a artistas reconocidos como Liam Gallagher.

El caso fue desmentido por Diego Salazar, quien logró ponerse en contacto con The New Yorker, y le respondieron que no reconocían las portadas que Hova supuestamente había diseñado para la revista. Además, al comunicarse con El Comercio y Somos, que habían publicado artículos sobre el trabajo de Hova, admitieron que no habían verificado la información y que simplemente habían confiado en la palabra del peruano.

Posteriormente, se descubrió que los diseños de Hova ni siquiera eran originales, sino recreaciones de portadas o ilustraciones ya existentes. Tras revelarse la verdad, el peruano se vio obligado a pedir disculpas en su cuenta de Facebook.

El caso de Anna Allen

Anna Allen es una actriz española que inició su carrera en el año 2000. Ganó reconocimiento por su participación en la serie de televisión ‘Cuéntame cómo pasó’, donde interpretó a Marta Altamira, uno de sus papeles más destacados. No obstante, parece que Allen aspiraba a alcanzar mayores niveles de fama y no estaba logrando sus objetivos.

Por lo tanto, en 2015, Allen comenzó a fabricar mentiras sobre su carrera cinematográfica, para obtener la fama y atención que deseaba. Aseguró haber trabajado en series como ‘The Big Bang Theory’, ‘White Collar’, y ‘Versailles’ Además, se convirtió en una artista de Photoshop, realizando fotomontajes para intentar convencer al público de que había conocido a Matt Bomer y que había asistido a la gala de los Oscar.

Después de que sus evidentes mentiras fueran descubiertas, Allen tuvo que retirarse de la actuación. Sin embargo, hizo un regreso en 2019 al participar en la serie de Netflix ‘Paquita Salas’. Incluso logró retomar su papel en ‘Cuéntame cómo pasó’ a fines de 2020.