La ciudad de Piura ha despertado a las consecuencias de una lluvia calificada por SENAMHI como ligera, con tan solo cinco milímetros de precipitación.
Sin embargo, en la urbanización Ignacio Merino, esta mínima cantidad ha sido suficiente para formar enormes charcos que dificultan el paso de vehículos y peatones.
Este problema no es nuevo; la zona se inunda año tras año, a pesar de que se ejecutaron obras de pistas y veredas hace aproximadamente cinco años, olvidando la instalación esencial de un drenaje pluvial adecuado.
Población piden obras
En diálogo con Canal N, una residente expresó su frustración ante la falta de soluciones efectivas por parte de las autoridades y la recurrente negligencia en la gestión de infraestructuras urbanas.
Se hacen llamados urgentes a las autoridades para que realicen obras que contemple el drenaje pluvial y eviten la repetición de estos desastres.
Mientras tanto, la municipalidad ha empezado a evacuar el agua acumulada, pero la solución parece ser solo un parche ante un problema estructural que afecta a la ciudad cada temporada de lluvias.
Lluvias afectan distrito de 26 de Octubre
El distrito 26 de Octubre en Piura se enfrenta nuevamente a severas inundaciones, como se evidencia en la saturada avenida Raúl Mataco José Aguilar.
A pesar de las obras de mitigación en el norte del país, las lluvias ligeras de cinco milímetros, según el SENAMHI, han dejado las calles anegadas, con el agua alcanzando la mitad de la altura de las llantas de los vehículos.
La preocupación de los habitantes y transportistas va en aumento, ya que estas inundaciones representan un riesgo para la salud pública por la posible proliferación de enfermedades como el dengue, cuyo brote del año pasado resultó en más de 88 mil casos.
La situación en Piura es especialmente preocupante, recordando las graves inundaciones del 2017 y la aparente falta de medidas preventivas y de infraestructura adecuada para manejar estas crisis.
