Rodeadas por un paisaje completamente verde, estas dos jóvenes atraviesan la única vía que cruza la infinita maleza de la selva en el centro poblado Valle de la Conquista, ubicado en Moyobamba.
Con tan solo 16 y 18 años, Dámaris y Neimar sacan adelante un esforzado emprendimiento. Con esfuerzo, y sobre todo mucho entusiasmo, fabrican harina de plátano natural, fortificada, nutritiva y sin peligro de alergias.
La materia prima, obviamente, es el plátano y por eso se dirigen hacia la chacra de uno de sus familiares para cortar árboles y recoger las frutas.
Su producto se hizo famoso luego de que ganaron un concurso regional organizado por el programa Aurora del Ministerio de la Mujer dirigido a poblaciones vulnerables.
A pesar de su juventud, hoy en día se perfilan como el gran símbolo de emprendimiento de su localidad.
El valor de ambas jóvenes es notorio a simple vista. Son dos almas luchadoras dispuestas a todo para crecer día a día y darle lo mejor a sus seres queridos.
El esfuerzo que hoy realizan recorriendo un camino difícil será su recompensa de mañana. En el Valle de la Conquista tuvimos la fortuna de conocer a un par de chicas con el hambre suficiente para conquistar el Perú, y por qué no, el mundo.
