Bebés con lengua blanca: ¿cómo saber si es leche o "algodoncillo"?

Si eres madre primeriza es probable que tengas muchas dudas con respecto a tu bebé.  Una de las más comunes es sobre su lengua y cuando esta se pone blanca.  ¿Cómo saber si es por leche o por el famoso algodoncillo?

Según explica la pediatra Estela Zamudio en el portal "Proyecto mamás", la causa más frecuente de ver la lengua blanca es por la leche (sea materna o fórmula).  Sin embargo, es importante descartar que no se por el algodoncillo, el cual es una infección por un hongo llamado "cándida".

Candidiasis oral en bebés
En general el hongo "cándida" se encuentra en el cuerpo en pequeñas cantidades. Está en la piel, en la boca, en el tracto intestinal y el área genital. Usualmente, no ocasionan enfermedad, pero cuando lo hacen es cuando se denomina candidiasis.

Esta infección puede afectar la piel, las membranas mucosas (por ejemplo, boca, garganta), uñas, ojos y pliegues de la piel del cuello y las axilas, así como también la región del pañal (por ejemplo, vagina, pliegues de la ingle).

¿Por qué se produce candidiasis en bebés?
Cuando estas infecciones son crónicas y duran mucho tiempo se tiene que descartar que el bebe no tenga las defensas; también se puede ver después de un tratamiento con antibióticos. Por eso se recomienda utilizar antibióticos solo cuando es realmente necesario.

¿Cómo diferenciar entre la leche y el algodoncillo?
Cuando un bebé desarrolla una infección por "cándida", los síntomas incluyen parches dolorosos amarillos o blancos en la lengua, labios, encías, paladar y parte interior de las mejillas. También se pueden esparcir en el esófago, provocando dolor al alimentarse.
También es común ver una dermatitis o enrojecimiento de la piel en la zona del pañal con un borde elevado.

Recomendaciones
El diagnóstico lo hará tu pediatra al examinar la boca y el cuerpo de tu bebé. Es importante que sigas las indicaciones del especialista para erradicar por completo el hongo y que no se presenten recaídas.

En algunas ocasiones, el pediatra puede recomendar el cambio de chupones o mamilas, ya que el hongo puede esparcirse por ese medio.

Una vez que inicia el tratamiento, la mayoría de infecciones por candidiasis mejoran en aproximadamente 2 semanas.