Mario Irivarren se quebró al hablar de Nieve, mascota de Onelia

Mario Irivarren debutó en el canal digital de Jefferson Farfán con un nuevo espacio junto a Laura Spoya y Gerardo Pe.

Lo que prometía ser una charla distendida, terminó convirtiéndose en un momento muy personal para el chico reality. 

Mario Irivarren rompió en llanto al hablar sobre accidente de Nieve

Durante la conversación, Mario fue consultado sobre la pérdida de Nieve, la mascota de Onelia Molina, su pareja.

Con visible tristeza, el conductor se quebró al recordar cómo han sido los días tras el fallecimiento del animal.

"Han sido dos días bastante difíciles porque esto fue el sábado. Estamos el uno al lado del otro intentando sobrellevar la situación", confesó entre lágrimas.

"Siento que aquí en adelante cada cosa que haga no tiene valor. Salir a caminar no tiene el mismo sentido si no está Nieve ahí", añadió. 

¿Qué dijo Mario Irivarren sobre el accidente de Nieve?

Irivarren evitó dar detalles sobre lo ocurrido y dejó claro que es Onelia quien decidirá si desea hablar públicamente.

“Básicamente fue un accidente, pero no quisiera tomarme la ligereza de contar qué pasó. Eso le corresponde a Onelia”, señaló.

El momento generó una ola de reacciones entre los seguidores del programa, quienes enviaron mensajes de apoyo en los comentarios.

Además, Mario mencionó que optaron por cremar a Nieve debido a que no tenían un lugar para enterrarla.

Onelia Molina devastada tras anunciar muerte de su perrita Nieve

Onelia Molina abrió su corazón al recordar los momentos más especiales junto a Nieve, la inseparable compañera que la acompañaba a los sets de televisión, viajes y prácticamente cada paso de su vida.

La ‘guerrera’ siempre mostraba el fuerte vínculo que tenía con su mascota, convirtiéndola en parte de su día a día tanto dentro como fuera de Esto es Guerra.

A través de Instagram, la conductora contó que Nieve perdió la vida a causa de un accidente, una noticia que la dejó devastada. Con profundo dolor, relató que su mundo “se vino abajo” al enterarse de lo ocurrido y enfrentar la idea de no volver a ver a su adorada perrita, quien tenía apenas cuatro años.

“Un pedazo de mi ser se fue de mi lado”, expresó conmovida, recordando que Nieve fue su compañía incondicional durante más de cuatro años, en los que la vio reír, llorar, atravesar dificultades y mostrar sus mejores y peores versiones.

“Siempre estuvo ahí”, añadió, resaltando el amor inquebrantable que la unía a su pequeña.