Gladys y Juana se emborracharon juntas por odio a Miguel Ignacio
Gladys y Juana se reunieron para aclarar el tema de Miguel Ignacio, pero no imaginaron que terminarían brindando juntas
Gladys decidió enfrentar a Juana al saber que tuvo una historia con Miguel Ignacio, pero ambas terminaron brindando juntas por despecho y recordando al empresario.
Gladys y Juana se emborracharon por Miguel Ignacio
La mamá de Otto buscó a Gladys para solidarizarse con Juana por ser víctima de Miguel Ignacio, pero esto enfureció a la prima de Olinda, quien defendió su romance con Nachito, pero le reclamó que no funcionó porque ‘Nachito’ nunca pudo olvidarla.
Tras ello, ambas decidieron reunirse en un bar para arreglar sus diferencias. Por lo que al llegar Juana y Gladys decidieron primero pedir un menú, aunque la prima de Olinda decidió pedir una cerveza.
Y luego de que Juana le recordara a Gladys que ambas estaban fregadas por un mismo hombre, la mujer de la selva decidió brindar junto a la exconquista de Miguel Ignacio y tomar licor.
Juana decidió hacer un brindis por el “desgraciado” de Miguel Ignacio, pero Gladys le dijo que no valía la pena y que brindaban por ellas misma.
Así fueron pasando las horas y los brindis aumentaban cada vez más.
Gladys se emocionó al conocer a Maripaz, pero incomodó a Tito
La expareja de Miguel Ignacio fue recibida por toda la familia tras llegar de la selva, a donde se fue a vivir junto a su hijo Otto, luego de abandonar a ‘Nachito’ cuando decidió destruir la antigua vivienda de los Gonzales.
Los nuevos miembros de la familia se fueron presentando con Gladys, quien no tuvo un buen recibimiento por parte de Juana, quien le pidió que tuviera cuidado al momento de saludarla, ya que se había pintado la uñas.
Sin embargo, la situación fue otra cuando Gladys conoció a July y a Maripaz, quien dejó impactada a la mamá de Otto al saber que era hija de Tito y que ya era toda una señorita, por lo que expresó su emoción.
“¡Tremendo mujerón! Yo en mis épocas en esa edad tenía hartos sheretes”, dijo Gladys, causando la molestia de Tito, quien le aclaró que su hija solo tiene un pretendiente y que estaba bien vigilado.