¡Tensión en el Caribe! EE.UU. toma petrolero y Venezuela estalla
Un operativo militar en el Caribe encendió la tensión: EE.UU. tomó un petrolero con crudo venezolano. Venezuela dice que fue piratería. ¿Y ahora qué?
La calma del mar Caribe se hizo trizas. Un grupo de comandos estadounidenses descendió sobre el buque “The Skipper” frente a Venezuela. Según Washington, transportaba crudo sancionado y operaba como parte de una red ilegal de exportación. El gobierno venezolano lo considera un acto de piratería.
La embarcación, con bandera de Guyana, llevaba meses transmitiendo posiciones falsas para evadir los radares. De acuerdo con la firma Vanguard Tech, formaba parte de una trama que involucra vínculos con Irán y Hezbollah.
Golpe para EE.UU., afrenta para Venezuela
Para Estados Unidos, es un golpe estratégico. Para Nicolás Maduro, una provocación inaceptable. Tras el operativo, Caracas anunció que llevará el caso a tribunales internacionales, y lanzó duras críticas a la administración estadounidense.
Un precedente en plena crisis
No es el primer operativo en la región. En los últimos meses, EE.UU. ha interceptado más de 80 embarcaciones por narcotráfico o actividades ilegales. Pero “The Skipper” no era una más: transportaba petróleo, el corazón económico de Venezuela.
Aviones, buques y tensión creciente
Como parte del endurecimiento, EE.UU. desplegó aviones de combate cerca de Venezuela. Cazas con capacidad de ataque inmediato y dominio aéreo. La presión no es solo militar: también hay nuevas sanciones económicas contra allegados al régimen.
Vuelve el foco a los sobrinos de Maduro
Washington sancionó nuevamente a tres sobrinos de la primera dama Cilia Flores: Frankie Flores, Efraín Campos y Carlos Malpica. Ya estuvieron presos en EE.UU., pero fueron liberados en un canje durante el gobierno de Joe Biden. Hoy, sus nombres reaparecen.
Cierre aéreo y vuelos cancelados
Como respuesta, Venezuela cerró su espacio aéreo. Varias aerolíneas cancelaron vuelos. Y el temor crece: el Caribe, con su tráfico comercial, ahora está en el centro de una posible escalada que no solo sería naval, sino también terrestre.
El mar Caribe ya no es el mismo. Rusia y Colombia condenaron la acción de EE.UU., y Trump respondió directamente a Petro. Mientras tanto, América Latina observa. ¿Habrá consecuencias en precios, rutas y unidad regional? Todo apunta a que sí.