Refuerzan seguridad en frontera Perú-Chile tras elección de Kast
Unos 50 efectivos policiales vigilan la línea de frontera. Los campamentos improvisados en el lado chileno lucen vacíos
La situación en el sur del país ha cambiado en las últimas horas con un notable incremento del resguardo policial. La frontera Perú-Chile amaneció con medidas de seguridad reforzadas tras la reciente elección de José Antonio Kast en el país vecino. Según el reporte desde la zona, se ha desplegado un contingente de aproximadamente 50 efectivos policiales que se encuentran ubicados a ambos lados de la vía para garantizar el orden y el control migratorio.
¿Cuál es la situación actual de los migrantes en la zona?
De acuerdo con la información recabada en el lugar, el panorama en la línea de frontera se mantiene tranquilo por el momento. Las autoridades confirmaron que no se registra la presencia de inmigrantes indocumentados intentando ingresar hacia territorio peruano en estas horas. El flujo regular se mantiene bajo control gracias a la presencia disuasiva de los agentes del orden que custodian el corredor internacional.
Un cambio significativo se observa en el lado chileno, específicamente en la pampa donde solían instalarse los extranjeros. El campamento improvisado que ocupaban los migrantes ahora luce completamente vacío. Según se pudo constatar, se han realizado las labores de limpieza respectivas en el área, eliminando los rastros de las carpas y pertenencias que anteriormente ocupaban este espacio geográfico.
La coyuntura ha generado gran expectativa mediática en la región fronteriza. Se reportó la llegada de diversos medios de prensa chilena que se encuentran en el lugar monitoreando el desarrollo de los acontecimientos tras los comicios. A pesar de la atención pública, la calma impera en el cruce oficial, donde el tránsito se desarrolla sin los disturbios que caracterizaron semanas anteriores.
¿Cómo se está resguardando las zonas más alejadas?
La estrategia de seguridad no se ha limitado únicamente a la vía principal de acceso. En los sectores más remotos de la frontera, específicamente a la altura de los hitos 15 y 18, también se han tomado medidas preventivas. En estos puntos, donde el control suele ser más complejo por la geografía, se ha dispuesto la presencia de efectivos para evitar cualquier ingreso irregular.
Según el reporte desde el sur, son los efectivos militares quienes están a cargo de custodiar estas zonas alejadas de la carretera. Su labor consiste en patrullar el desierto para asegurar que no existan filtraciones de personas indocumentadas por pasos no habilitados. Este despliegue busca cubrir los flancos vulnerables de la línea divisoria entre ambos países.
El panorama general en la frontera sur es de vigilancia extrema pero pacífica. Tanto la Policía Nacional en la vía principal como las fuerzas militares en los hitos periféricos mantienen sus posiciones. Las autoridades peruanas continúan atentas a cualquier cambio en el flujo migratorio que pudiera derivarse de la nueva situación política en Chile.