Piques ilegales: El calvario para los vecinos de Chorrillos
Más de 250 motociclistas realizan piques ilegales en la Costa Verde cada semana. El ruido, los accidentes y el caos desvelan a vecinos de Chorrillos
Cada jueves por la noche, más de 250 motociclistas se reúnen clandestinamente en la Costa Verde para realizar piques ilegales. Estas carreras callejeras no autorizadas se han vuelto frecuentes, especialmente en la zona de Agua Dulce, en Chorrillos.
A pesar de operativos con presencia policial y militar, los grupos se reorganizan y vuelven a aparecer. Muchos huyen al ver la intervención y algunas motos abandonadas incluso han sido reportadas como robadas.
¿Cómo afecta esto a los vecinos?
El impacto es severo. Vecinos como Ester Ventura, Natalia Cisneros, Mirella Vargas y Oswaldo Núñez denuncian que no pueden dormir por el estruendo de los motores, que retumba en sus ventanas y paredes hasta la madrugada. Algunos residentes han optado por mudarse ante la falta de descanso y tranquilidad.
Se reportan incluso problemas de salud como insomnio y ansiedad. En edificios de Malecón Grau y zonas altas de Barranco, el sonido se amplifica por la geografía costera.
¿Qué sanciones existen y por qué no funcionan?
Los infractores reciben multas por participar en “competencias de velocidad no autorizadas”. La sanción es de S/1 140 y 60 puntos menos en la licencia. Sin embargo, estas penalidades no disuaden a los motociclistas, quienes incluso retiran los silenciadores de sus motos para generar más ruido.
Autoridades locales como la Subgerencia de Seguridad Ciudadana de Chorrillos afirman que necesitan operativos conjuntos y regulares. También se exige una ley que prohíba los escapes modificados y sanciones más duras.