Padres rechazan clases virtuales tras amenazas en colegio de SJL

Una situación alarmante ha encendido las alertas en el colegio Rayitos de Sol, ubicado en la zona de Mariátegui en San Juan de Lurigancho. Según denunciaron los padres, desde hace dos semanas la institución viene recibiendo mensajes extorsivos con amenazas directas contra la seguridad de los alumnos. Esta situación obligó a suspender las clases presenciales como medida preventiva.

El mensaje, dirigido a la directora del plantel, advierte que “ya tenemos ubicados a toda la familia y conocemos todos sus movimientos”. Los extorsionadores exigieron una pronta respuesta bajo amenaza de actuar contra los estudiantes. Ante este panorama, la comunidad educativa se encuentra en estado de alerta y exige soluciones inmediatas.

¿Por qué los padres rechazan las clases virtuales?

Frente a las amenazas, una de las opciones planteadas fue regresar a la modalidad virtual. Sin embargo, esta propuesta fue rechazada por la mayoría de padres de familia. Señalaron que muchos no cuentan con conectividad ni dispositivos adecuados. Además, recalcaron que los niños de nivel inicial no pueden adaptarse a un sistema virtual.

“Este es un colegio pequeño, con solo 76 alumnos. La mayoría de nosotros trabaja y deja a los niños aquí para que estudien seguros. Con la virtualidad, eso no es posible”, declaró una madre. También mostraron preocupación por el impacto económico y laboral en los profesores del plantel.

¿Qué están pidiendo los padres a las autoridades?

Los padres y madres del colegio Rayitos de Sol se concentraron en los exteriores de la institución para exigir presencia policial permanente. Indicaron que la comisaría más cercana no ofrece patrullaje constante, y que solo han visto al serenazgo durante la cobertura de los medios. “Queremos un patrullero diario para nuestros niños. No a la extorsión, sí a las clases presenciales”, exclamaron.

La comunidad escolar hizo un llamado a la presidenta, al ministro del Interior y a las autoridades locales para que garanticen la seguridad en la zona. “Nuestros niños tienen derecho a estudiar sin miedo. Esto no puede seguir así”, señalaron en conjunto.

¿Cómo afecta esta situación a los colegios pequeños?

Este caso pone en evidencia una nueva preocupación para los colegios de Lima: la expansión de la extorsión hacia centros educativos, incluso los más pequeños. Con pocos recursos y sin fines de lucro evidentes, instituciones como Rayitos de Sol se convierten en blanco fácil para bandas delictivas.

Los padres temen que esta situación se repita en otros colegios y pidieron que se tomen acciones inmediatas para frenar las amenazas. Mientras tanto, insisten en mantener las clases presenciales, pero bajo condiciones de seguridad que protejan tanto a los alumnos como al personal docente.