Caen tres cómplices de banda D.E.S.A que operaba desde prisión
Tres personas fueron detenidas en SMP por ejecutar extorsiones ordenadas desde prisión por la banda D.E.S.A
Tres personas fueron capturadas por ejecutar extorsiones bajo órdenes de internos del penal Sarita Colonia y otros centros del país. Según la Policía, los detenidos pertenecen a la organización criminal D.E.S.A, cuyos principales miembros ya se encuentran encarcelados.
La investigación se inició tras la denuncia de un comerciante de abarrotes que recibió amenazas constantes a través de mensajes de texto, acompañados de videos intimidatorios. Los extorsionadores le exigían S/70,000 a cambio de no atentar contra su vida o su negocio.
¿Cómo se realizó la captura de los implicados?
La víctima realizó un primer pago de S/3,000. Con ese dato, agentes de la División de Investigación de Extorsiones de la Dirincri rastrearon el destino del dinero y llegaron hasta el asentamiento humano 12 de agosto, en San Martín de Porres.
Allí capturaron a Carmen Yacila Meneses, Lucía Alvarado Fernández y Miguel Alexis Vásquez Carrero. Según el coronel Víctor Revoredo, jefe de la división, Vásquez era el ejecutor e intermediario con la línea violenta, mientras que las dos mujeres se encargaban de recibir el dinero mediante transferencias para luego entregarlo a su contacto directo.
¿Quiénes están detrás de la banda criminal D.E.S.A?
De acuerdo con la Policía, los detenidos recibían instrucciones de miembros de la organización D.E.S.A, que ya se encuentran en prisión tras operativos realizados en agosto y septiembre. Sin embargo, desde el interior del penal, continúan coordinando extorsiones a través de cómplices en libertad.
“Diariamente coaccionaban psicológicamente al empresario, incluso hay denuncias por disparos y daños materiales”, informó el coronel Revoredo. La banda mantiene contacto con internos de diversos penales y habría extendido sus operaciones a otras zonas de Lima Norte.
La Policía continúa investigando a otros posibles integrantes de esta red criminal que, pese a las capturas previas, sigue operando desde las cárceles del país.