Alcalde sobre el tren Lima-Chosica: Riesgos y piden planificación
Alcaldes de Chosica y Magdalena piden estudios, coordinación y obras para evitar errores en la ejecución del tren Lima–Chosica.
¿Por qué el alcalde de Chosica muestra preocupación por el tren Lima–Chosica?
Oswaldo Vargas, alcalde de Chosica, expresó que el entusiasmo vecinal por el tren Lima–Chosica es alto, pero advirtió que el proyecto enfrenta demoras significativas. Afirmó que la iniciativa se ha politizado y que, aunque el transporte ferroviario sería beneficioso, no podrá implementarse rápidamente por la falta de definiciones técnicas y procesos administrativos.
Vargas explicó que la responsabilidad recae en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), entidad que debe autorizar la operatividad del tren y organizar el concurso de concesión. Según indicó, la ruta requiere análisis técnicos previos y el cumplimiento de normas específicas antes de poner en marcha los trenes donados por Estados Unidos.
¿Qué tipo de riesgos podrían afectar el recorrido del tren?
Uno de los principales temores del alcalde de Chosica es el impacto de los desastres naturales. Señaló que las lluvias intensas en la zona provocan el desborde del río Rímac, que en años anteriores ha carcomido las bases de los rieles. Esta situación pone en peligro el tramo ferroviario, especialmente entre el puente Los Ángeles y Chosica.
Según Vargas, este tramo es altamente vulnerable y requiere obras de prevención por parte de Lima Metropolitana, el MTC y el gobierno central. “La mitigación de riesgos debe ser prioridad si se quiere garantizar un servicio estable”, insistió.
¿Qué beneficios económicos podría traer el tren Lima–Chosica?
El alcalde destacó que el tren permitiría a los vecinos de Chosica reducir sus gastos diarios en transporte. Actualmente, muchos ciudadanos invierten hasta S/30 para trasladarse a Lima. Con el tren, ese gasto se reduciría considerablemente.
Se estima que el sistema ferroviario podría movilizar a unos 2 mil pasajeros al día, descongestionando además las rutas más transitadas de Lima Este. Vargas calificó este impacto como una “necesidad urgente”, sobre todo para los trabajadores que se desplazan a diario.
¿Cuál es la postura del alcalde de Magdalena sobre este proyecto?
Francis Allison, alcalde de Magdalena, también respaldó la propuesta del tren, pero pidió que no se avance sin orden ni coordinación. En su opinión, no basta con contar con los vagones; se necesitan estudios técnicos y la participación de entidades como la ATU, que tienen competencia directa en transporte público.Allison subrayó que la Municipalidad de Lima no puede actuar por su cuenta, y que deben considerarse obras complementarias para asegurar que el servicio funcione adecuadamente. "No se trata de lanzar un tren sin planificación", indicó.
¿Qué papel debería asumir el MTC y otras autoridades?
Tanto Allison como Vargas coincidieron en que el MTC debe liderar el proceso. Esta institución tiene la responsabilidad de certificar el estado de las locomotoras, garantizar la seguridad técnica y organizar la concesión. Además, deben coordinarse acciones con las municipalidades y organismos especializados para evitar improvisaciones.
El mensaje de ambos alcaldes fue claro: sin coordinación, el tren no funcionará de manera eficiente y podría generar más problemas que soluciones.
¿Qué trenes fueron presentados por la Municipalidad de Lima?
El 14 de julio, la Municipalidad Metropolitana de Lima presentó un lote de 43 vagones y 11 locomotoras donados por la empresa estadounidense Caltrain. Estos trenes forman parte de una flota mayor que incluye 90 coches galería, 19 locomotoras y varios contenedores de repuestos.
Los primeros vagones fueron trasladados desde el puerto del Callao hacia la capital, donde fueron exhibidos públicamente. A pesar del entusiasmo inicial, no existe aún un cronograma claro para su entrada en operación.
¿Qué hallazgos reportó la Contraloría sobre los vagones?
El 19 de julio, la Contraloría General de la República realizó una inspección en la estación de Monserrate, donde están almacenados los trenes. Durante la visita, se constató la presencia de 30 vagones y una locomotora, varios con una antigüedad cercana a los 40 años.
La Contraloría detectó daños físicos como asientos sin respaldo y discrepancias en la información técnica. Por ejemplo, mientras algunas placas indican que el overhaul fue realizado en 2002, se reporta que el mantenimiento se ejecutó en 2020, lo que deberá ser verificado.
¿Qué falta para que los trenes empiecen a operar?
Según el vicecontralor Marco Argandoña, es indispensable un proceso de homologación técnica para que las locomotoras cumplan con las normas peruanas. Además, se analizará la documentación financiera, ya que existen valores distintos declarados sobre la donación: uno de $224 millones, otro de $4.9 millones, y un tercero por $24 millones correspondientes al traslado.
La habilitación de los trenes dependerá del cumplimiento de estos procesos y de la voluntad política para coordinar entre las entidades del Estado. El tren Lima–Chosica representa una oportunidad para miles de ciudadanos, pero enfrenta trabas importantes: riesgos naturales, falta de planificación técnica y escasa coordinación entre autoridades. Las advertencias de los alcaldes de Chosica y Magdalena apuntan a la necesidad urgente de ordenar el proyecto antes de avanzar.