Acribillan a un colectivero frente a su hijo y esposa en SMP
Max Quispe fue atacado por un sicario cuando se despedía de su esposa e hijo. La víctima ya había sido detenida antes con un arma de fuego sin registro
Un nuevo hecho de sangre remeció San Martín de Porres. Max Luis Quispe, un hombre de 33 años que se dedicaba al servicio de taxi colectivo, fue asesinado a balazos frente a su esposa e hijo en la puerta de su vivienda. El ataque ocurrió la noche del domingo en la calle Las Cantutas, en la urbanización Vipol, cuando la víctima acababa de regresar a su hogar.
Según testigos, Quispe estaba dentro de su vehículo despidiéndose de ella y de su pequeño hijo, cuando un sujeto apareció caminando y le disparó en múltiples ocasiones. El niño se encontraba todavía dentro del auto cuando ocurrió el crimen.
¿Cómo se desarrolló el ataque?
Testigos narraron que el asesino llegó a pie y se acercó directamente al vehículo donde Max Quispe permanecía con su familia. En cuestión de segundos, desenfundó un arma de fuego y disparó siete veces contra el colectivero. Luego, huyó a pie hasta una motocicleta que lo esperaba a una cuadra y media del lugar. El cómplice arrancó el vehículo y ambos escaparon rumbo al este.
"Estaba adentro del carro cuando le dispararon, y escuché cuando se cayó”, declaró un amigo de la víctima entre lágrimas. A pesar de la cercanía del ataque, tanto ella como su hijo resultaron ilesos.
¿Quién era Max Quispe?
Max Luis Quispe tenía 33 años y se dedicaba al servicio de taxi colectivo. Según versiones de su entorno, acababa de visitar a su familia antes de ser asesinado.
Sin embargo, registros policiales indican que Quispe contaba con antecedentes. En 2023 fue detenido durante una intervención policial en la avenida Paramonga, SMP. En aquella ocasión, se le encontró un revólver con el número de serie erradicado, lo que lo llevó a ser puesto a disposición de las autoridades.
¿Qué hipótesis manejan las autoridades?
Agentes de la comisaría de San Martín de Porres y de la División de Homicidios ya se encuentran investigando el caso. La principal hipótesis es la de un ajuste de cuentas, aunque no se descartan otras líneas relacionadas con posibles amenazas o represalias por conflictos previos.
La Policía Nacional ha iniciado el levantamiento de evidencias en la zona, incluyendo imágenes de cámaras de seguridad y testimonios vecinales.