Ucayali: deuda de 14 mil soles habría sido móvil del crimen de Olivia Arévalo
Testigo afirma que el extranjero había prestado dicha suma de dinero al hijo de la lideresa shipibo-konibo
Para la Fiscalía, el rompecabezas empieza a armarse. Un testigo de la masacre al canadiense Sebastian Paul Woodroffe, asegura que éste tenía una mochila con un arma. Minutos antes, la población había escuchado los disparos que acabaron con la vida de Olivia Arévalo.
En entrevista exclusiva con América Noticias, Ricardo Jiménez Flores, presidente de la Junta de Fiscales Superiores de Ucayali, señaló que un poblador declaró que el extranjero había prestado la suma de 14 mil soles al hijo de Olivia Arévalo.
Sebastian Woodroffe, a bordo de una motocicleta que le habían prestado, habría ido en busca del hijo de la lideresa shipibo-konibo para cobrar la deuda.
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Woodroffe compró un arma trece días antes del homicidio de la lideresa indígena, el hombre pagó 3 mil soles por una pistola que posteriormente desapareció.
La distancia entre la casa de Olivia Arévalo y el lugar donde lincharon al canadiense, tiene menos de 100 metros, y el lugar donde lo enterraron se ubica a unos 300 metros a la redonda.
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La lideresa shipibo-konibo y su presunto asesino murieron el mismo día, la Policía y la Fiscalía investigan como apareció el afiche que ofrecía una recompensa por la captura de Woodroffe si ya estaba muerto.
Las autoridades están empeñadas en capturar a Jose Ramírez Rodríguez y Nicolás Mori Guimaraes, los dos comuneros que aparecen en el video de la ejecución Woodroffe, quienes ya no se encuentran en la comunidad de Victoria Gracia.
