El Tribunal Constitucional juega papel clave en la crisis política

Con varios casos de interés nacional por resolver, el organismo también permanece en incertidumbre ante los hechos recientes

El momento crucial del Tribunal Constitucional. Foto: América TV

A casi una semana de la disolución del Congreso, la discusión sobre la constitucionalidad de la decisión del presidente Martín Vizcarra continúa.

Las preguntas que han intentado responder desde políticos hasta constitucionalistas tienen que ver con la legalidad de la disolución y con lo que viene luego en el caso.

El Congreso eligió, en medio de toda la crisis, a Gonzalo Ortiz de Zeballos Olaechea como nuevo tribuno. Algunos congresistas denunciaron irregularidades en la elección. 

Según reglamento, Pedro Olaechea debió someter las reconsideraciones de los congresistas a votación. No lo hizo y por ende la elección de Ortiz de Zeballos no se habría concretado.

Según el reglamento del TC, los miembros electos asumen sus cargos dentro de los 10 días siguientes a la publicación del nombramiento en El Peruano. Esto no ha ocurrido.

El electo tribuno pidió al titular del TC que se defina fecha para su juramento junto a una resolución congresal de su nombramiento firmada por Olaechea.

El problema es que la resolución le ordena al TC que el magistrado a ser reemplazado tenga la colegiatura de menor antigüedad. Según expertos, el TC tiene la potestad de definir quién es el magistrado que debe ser reemplazado y no el Congreso.

Los casos que deberá resolver el TC son de vital importancia: habeas corpus de Keiko Fujimori y Jaime Yoshiyama, la constitucionalidad de la disolución del Congreso, devolución de bonos de la Reforma Agraria, entre otros.

El próximo jueves 10, el pleno del TC revisaría la solicitud de Ortiz de Zeballos.

En cuanto a la acción de competencia que se presentaría ante la institución para poder definir si la disolución congresal es constitucional, esta puede tomar hasta cuatro meses.

Esto cuando incluso los peruanos vayamos a las urnas para elegir al nuevo Congreso hasta el 2021. El tema es complejo y los tiempos premian, pero donde el TC estará en el foco de la opinión pública en las siguientes semanas.

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