Hombre fue a sacar plata de un cajero y aparece muerto en el río Rímac
En el cuerpo del joven padre de familia se halló orificios de bala y un aparente corte en el cuello hacían pensar que todo fue culpa del hampa.
Los policías no solo encontraron un cadáver en el río Rímac sino también una caja de misterios que nuevamente tiene a los delincuentes como sus protagonistas.
Hasta el puente Dueñas llegaron unas personas que sospechaban que se podría tratar de un familiar desaparecido desde la semana pasada.
Marcos Nuñez busca a su sobrino Brady Morante Nuñez desde el día lunes en el que salió a retirar dinero de un cajero para invitarles una salchipapa a sus hermanitos pequeños.
El joven de 24 años nunca regresó a la casa de su madre en Mirones Bajos. Cerca del lugar donde hallaron el cadáver, desde ese día cada minuto se volvió insoportable para su familia.
El cuerpo fue encontrado a la 1 de la tarde, pero Marco y sus seres queridos y la policía tuvieron que esperar más de cinco horas hasta que llegara el fiscal que finalmente autorizó el rescate.
Al momento de identificar el cuerpo, la familia reconoció que pertenecía a Brady Morante Nuñez. La madre del joven vigilante no podía creer que se tratara del mayor de sus hijos.
En el cuerpo de Brady se halló orificios de bala y un aparente corte en el cuello hacían pensar que todo fue culpa del hampa.
A esto se le suma los varios retiros que realizaron desde la tarjeta del joven el último viernes.
Brady fue padre hace dos semanas y su hijo nunca lo volverá a ver. En su cuerpo está tatuado el dolor y las huellas de los delincuentes que no solo se llevaron el dinero y su vida sino también un pedazo del corazón de su familia.
