Hoy:

    Compromiso y sacrificio de bomberos en incendio de Barrios Altos

    Más de 350 bomberos han trabajado sin descanso desde hace casi una semana. Relatan que falta de agua y equipos dificultan su trabajo.

    Foto y video: América Noticias

    El incendio de gran magnitud que consumió varias edificaciones en Barrios Altos, en el Cercado de Lima, ha puesto a prueba la valentía y resistencia de los bomberos peruanos. Desde que se reportó la emergencia, más de 350 hombres y mujeres del Cuerpo General de Bomberos Voluntarios del Perú han trabajado sin descanso para evitar que las llamas se expandan a otras viviendas y almacenes cercanos.

    Los rescatistas han permanecido en la zona por largas horas, enfrentando condiciones extremas como el colapso de estructuras y la intensa humareda. Entre ellos se encuentran el comandante general del Cuerpo de Bomberos, Juan Carlos Morales, la teniente brigadier Karin Arbulú y el subteniente Álvaro Colán, quienes junto a sus compañeros han dado lo mejor de sí para controlar el siniestro.

    Dificultades en la emergencia

    Los bomberos que han trabajado en el incendio de Barrios Altos han enfrentado múltiples desafíos. Según el comandante Juan Carlos Morales, uno de los principales problemas fue la falta de acceso a los almacenes en llamas debido a la estrechez de las calles y a la forma en que estaba organizada la mercadería dentro de los edificios.

    Otro de los inconvenientes fue la falta de agua en la zona. Durante la primera noche de labores, el abastecimiento fue insuficiente, lo que generó momentos de frustración entre los rescatistas. “Hubo una hora y media en la que no cayó ni una gota de agua, lo que nos hizo sentir impotentes”, relató Morales.

    Pese a ello, el equipo continuó con sus labores sin bajar la guardia. Unidades como la compañía de bomberos de Miraflores utilizaron escaleras telescópicas para poder lanzar agua desde lo alto y contener las llamas.

    Vocación de servicio y entrega

    La entrega y sacrificio de los bomberos ha quedado demostrada en esta emergencia. Muchos de ellos han tenido que sacrificar su descanso para continuar en la zona. Karin Arbulú, teniente brigadier, contó que incluso cambió su día libre para poder acudir al llamado de emergencia.

    Álvaro Colán, por su parte, destacó que en este tipo de situaciones el miedo debe quedar de lado y la prioridad es salvar vidas. “Siempre habrá miedo, pero hay que aprender a controlarlo. Nuestra misión es salvar vidas y preservar la propiedad”, afirmó.

    El incendio en Barrios Altos ha sido catalogado como uno de los más grandes registrados en los últimos 40 años en Lima. A pesar de los desafíos, la labor de los bomberos ha sido clave para evitar que la tragedia sea aún mayor. La emergencia aún no ha sido completamente controlada y se espera que las labores continúen en los próximos días.