Alias 'Pequeño J': así fue rastreado y capturado en el Perú
Tras huir por Bolivia, fue ubicado en la cabina de un tráiler que transportaba pescado hacia Lima. Se negó a aceptar la extradición voluntaria a Argentina.
El rostro sereno de Tony Janzen Valverde Victoriano, conocido como “Pequeño J”, no delató nervios al momento de su captura. Sin embargo, el joven de 20 años, acusado de orquestar el asesinato de tres mujeres en Argentina, comenzó a mostrar inquietud frente al juez que le dictó prisión preventiva con fines de extradición. Su historia es la de una vida marcada por el crimen desde la infancia, y una fuga internacional que terminó en un operativo policial en la carretera peruana.
Alias “Pequeño J” fue localizado en la cabina de un tráiler que transportaba pescado hacia Lima. Llevaba días oculto, intentando evitar su captura tras haber huido desde Argentina por la frontera boliviana. El operativo, ejecutado a la altura del kilómetro 58 de la Panamericana Sur en Pucusana, puso fin a una semana de intensa búsqueda.

¿De qué lo acusa la justicia argentina?
Tony Valverde es señalado como autor intelectual del asesinato de Lara Gutiérrez, Brenda del Castillo y Morena Verdi. Las tres jóvenes argentinas fueron secuestradas, torturadas y asesinadas luego de que una de ellas, según la investigación, robara tres kilos de cocaína valorados en 60 mil dólares.
La droga pertenecía a una red criminal que, de acuerdo con las autoridades, estaba bajo control de “Pequeño J”.
Las tres víctimas fueron captadas por supuestos clientes y trasladadas en una camioneta blanca. El viaje, que ellas creyeron las llevaba a una fiesta, culminó en una casa de Florencio Varela donde ya se había cavado un pozo.
Según el Ministerio Público argentino, el crimen fue transmitido por redes privadas del narcotráfico como una advertencia a otros miembros del crimen organizado.
¿Cuál es el perfil criminal de “Pequeño J”?
Alias “Pequeño J” es hijo de Janhzen Valverde, exintegrante de la banda criminal “Los Injertos de Nuevo Jerusalén”, asesinado en 2018. Su formación estuvo rodeada de violencia, armas y mensajes de venganza. Desde pequeño aparecía en videos familiares entre gritos, alcohol y frases como “toda la vida bandido”.
En redes sociales compartía imágenes con armas, frases alusivas al poder narco y enviaba transferencias de dinero a familiares vinculados con actividades ilícitas. Las autoridades lo identifican como parte de una tercera generación delictiva dentro de una organización criminal transnacional.

¿Qué halló la Policía en su escondite?
Tras su huida a Bolivia, Valverde se instaló en un departamento en Isidro Casanova. Allí, la Policía encontró armas, una pistola Glock, municiones, documentos con transferencias internacionales y un mensaje en la puerta: “Tu Dios te ama. Si te metes conmigo, te metes con Dios”. Entre las evidencias se identificó una remesa de 400 dólares enviada a Luis Alan Valverde, alias “Serranacho”, su tío y presunto cabecilla de una facción criminal en Lima.
Durante la investigación también se descubrió que Tony Valverde mantenía múltiples relaciones sentimentales. Una de esas parejas fue la clave para su localización. En una llamada, encendió uno de sus celulares, permitiendo el rastreo de su ubicación.
¿Qué ocurrió durante la audiencia?
En la audiencia de control de detención, alias “Pequeño J” negó ser responsable del crimen y rechazó someterse a una extradición voluntaria. Aseguró que le están “echando la culpa” y pidió que se identifique al verdadero responsable. Durante la sesión judicial mostró gestos visibles de nerviosismo: se frotó los ojos, se tocó la cabeza, estiró los brazos.
Pese a su negativa, el juez ordenó su internamiento en el penal de Cañete por un periodo de nueve meses, mientras se tramita el pedido formal de extradición por parte de Argentina.

¿Hay más implicados en el caso?
Junto a alias “Pequeño J”, otras personas fueron identificadas como parte de la logística criminal. Matías Agustín Ozorio, argentino de 28 años y supuesto lugarteniente, fue detenido en Perú y posteriormente expulsado del país. En declaraciones, afirmó que fue traído con engaños por narcos a quienes debía dinero.
También fueron detenidos Víctor Sotacuro Lázaro, responsable del traslado de las jóvenes, y su sobrina Florencia Ibáñez, quien fue captada en el asiento del copiloto en la camioneta utilizada en el crimen.
La justicia argentina sostiene que Pequeño J es parte de una red narco internacional con operaciones en Perú, Argentina y Chile. Su captura en territorio nacional marca un avance crucial en la cooperación policial para enfrentar delitos de alto impacto.
• Alias “Pequeño J” fue capturado en un tráiler en Pucusana.
• Es acusado de ser autor intelectual de un triple asesinato.
• Las víctimas eran tres jóvenes argentinas vinculadas a prostitución.
• El crimen fue transmitido como advertencia en redes narco.
• Negó cargos y rechazó extradición voluntaria ante el juez.
• Recibió prisión preventiva por nueve meses en penal de Cañete.
• La red tiene conexiones entre Perú, Argentina y Chile.














