Pablo no imaginó que terminaría con fuerte puñetes y patadas a manos de la policía en prisión.
Pablo (Javier Dulzaides) recibió terribles golpes de la policía al ser encerrado en la carceleta. Y es que Bastian (Rodrigo Sánchez Patiño) mandó a averiguar la identidad del joven con el comisario, quien no dudó en mandarlo a prisión para hacerlo hablar. Sin embargo, también aprovechó para darle unos puñetes y patadas como "lección".
Rocío (Marisa Minetti) supo que Pablo quería mostrarle a Bastian las fotos donde se está besando con Mario (Miguel Álvarez) y le rogó que no lo haga. "No me puedes hacer esto, me vas a destruir la vida. Te suplico. Imagínate si Gabriela se entera de todo esto, tú me dijiste que la quieres, sufriría muchísimo. No le muestres esas fotos a Bastian", dijo.
Asimismo, le ofreció ayuda para conquistar a Gabriela (Sirena Ortiz) y a involucrarlo en el negocio escondido de la familia. Si bien, el joven se negó a aceptar que manipule a su hija para que lo vea con otros ojos, luego se puso en duda al saber que tiene una oportunidad para hacer más dinero.