Este oficio es la nueva sensación entre los jóvenes.
Hoy ellos ya no quieren ser cocineros, ni grafiteros, menos periodistas, sino barberos. Es decir artistas de la navaja con filo y filamento. El arte aún poco comprendido de la barbería es un furor.
Y no estamos hablando solamente de los futbolistas que tienen su lista de barberos favoritos y que lucen en la propia cresta los últimos golazos de la estética urbana, sino de los simples mortales que han adoptado la religión del verse bien, del gozarse limpios y afeitados como quizá ninguna otra generación pudo estarlo. Y todo por el talento al alcance del bolsillo de los nuevos barberos.
Esta es la barbería Top Level de la cuadra 38 de la avenida Perú en San Martin de Porres. Llegamos aquí no solo por el muy solicitado Junior, barbero estrella de varios futbolistas famosos, sino por la gran cantidad de chicos de talento con las tijeras y la navaja que aquí se concentran.