‘Stranger Things 3’: Millie Bobby Brown habla sobre la escena más difícil de Eleven & Hopper

La serie de Netflix, Stranger Things, ha brindado muchos momentos dolorosos en sus últimas dos temporadas y si creías que ya habías visto todo, estás equivocado. La tercera parte que se estrenó el jueves pasado, presentó una de las escenas con mayor impacto emocional hasta la fecha.

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Centrada en la relación del padre adoptivo de Eleven (Millie Bobby Brown) y Hopper (David Harbor), la escena más triste de la temporada es una de las últimas. El policía habla en voz en off mientras que Eleven lee una carta que su padre había preparado acerca de lo difícil que era para él aceptar que estaba creciendo, pero que lo haría porque quería que ella fuera feliz. Fue un discurso que Hopper siempre tuvo la intención de dar, pero que nunca pudo hacerlo. Peor aún, no está claro si Hopper alguna vez podrá tener este tipo de relación con Eleven considerando que la serie quiere hacernos creer que está muerto.

Millie conversó recientemente con Entertainment Weekly sobre su papel y habló sobre cómo fue grabar esta escena particularmente difícil. Brown reveló lo siguiente:

"No quería leer ese discurso. No quería escuchar sobre eso. No quería ensayarlo. Inmediatamente quise ponerme una cámara y encontrar la forma en que reacciono".

Capturar a Millie en ese momento, sin saber lo que iba a leer, permitió que ocurriera uno de los momentos más auténticos y emocionales. Filmar la escena fue difícil para ella, porque actuaba como Eleven, que estaba de duelo por Hopper, y procesaba la idea de perder a Harbor en tiempo real a medida que la cámara rodaba. Esto fue lo que dijo:

"La forma en que reaccioné fue pura devastación y tristeza. Así que definitivamente fue una emoción cruda, especialmente porque David Harbour y yo somos muy cercanos. Él es uno de los mejores hombres. Creo que algo que admiro de David es que respeta tanto a las niñas como a las mujeres. Me sentí tan… estoy tan destrozada y me dije: 'Oh, Dios mío, esto es horrible'. Así que las emociones eran reales en esa escena, sin duda".

Sin embargo, esa no fue la única escena emocional que la joven actriz tuvo que filmar para la temporada 3. La otra secuencia fue cuando todos los protagonistas se despedían:

“Fue tan emotivo como parecía. Todos dijimos: 'Imaginemos que este es el fin de la filmación para siempre'. Y todos empezamos a llorar inmediatamente tan pronto cuando dijeron “acción”. Se sintió realmente genuino y fue como despedirse de los mejores amigos ".

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