CUANDO EL DIABLO LLAMA

Shirin ha decidido emprender un nuevo hogar con compañero Fredrik y su hijastro de 5 años, Lucas, y para ello la familia decide mudarse a un barrio residencial lejos de la ciudad. A ella se le presentará una oportunidad de oro durante los días que el esposo abandona la casa para trabajar en un proyecto y así pasar más días al lado del pequeño Lucas, pero lo que no saben es que la casa de al lado no está tan vacía como creen. Cuando la mujer se queda sola en casa con el niño empiezan a suceder fenómenos extraños relacionado con la casa de al lado que se encuentra deshabitada. Sin embargo, cuando Lucas habla de su nuevo amigo, ella comienza a sospechar porque la otra mitad de la casa ha estado vacía durante años. Poco a poco, descubre que la casa guarda un terrible secreto y que algo malvado persigue a Lucas.