Diego y Antonia dejarán en la ruina a Francesca (AVANCE)
Diego llegará con su madre para intentar desalojar a Francesca y su familia de la mansión.
Antonia (Attilia Boschetti) y Diego (Giovanni Ciccia) llegarán a Las Nuevas Lomas para intentar hacerse posición de la mansión de Francesca Maldini (Yvonne Frayssinet), a quien enviaron a una casa de reposo tras afirmar que su hija fallecida Isabella, está viva en Chiclayo. Los Montalbán pedirán a Leonardo, Alessia, Angelita y Macarena que se retiren de la casa.
Angelita extraña a Francesca tras enloquecer por Isabella viva
Tras asegurar haber visto viva a Isabella (Karina Calmet), Francesca Maldini (Yvonne Frayssinet) cayó en una crisis emocional que sorprendió a todos. Sin embargo, fue Angelita quien no pudo contener la pena al ver a la matriarca desbordada y sin el control que siempre la caracterizó.
El colapso emocional de Francesca se intensificó cuando todos la miraban con incredulidad. Su obsesión por recuperar a su hija hizo que perdiera el control frente a quienes más la querían destruir, dejando entrever que su salud mental pendía de un hilo. Al ver a Francesca fuera de sí, Angelita no pudo más. La hija de Claudia Llanos ahora dormía sola sin Franchi. La angustia fue aún mayor cuando Koky, por órdenes de Diego, se llevó a Francesca con engaños a un centro de reposo o un hotel.
Koky traicionó a Francesca tras enloquecer por Isabella viva
La revelación de que Isabella podría estar viva alteró por completo la estabilidad de Francesca. Tras ver el video grabado en Chiclayo, en el que aparentemente aparece su hija, la empresaria ideó un plan digno de una operación militar para rescatarla. La escena, lejos de convencer a los presentes, terminó siendo motivo de burla, especialmente por parte de Miguel Ignacio, quien la ridiculizó frente a todos.
Francesca pedía millones para su “misión” y aseguraba estar lista para ir a la guerra si era necesario. Preocupado por el estado mental de Francesca, Diego contactó a Koky para que la calmara. Sin saber que todo era parte de un plan, Francesca confió en él. Koky, fingiendo preocupación, la convenció de dar un paseo. Lo que ella no sabía era que su destino final no era otro que un centro de reposo.
