Luis Almagro se compromete a liderar una OEA más resolutiva y a reintegrar a Cuba

Almagro dijo los objetivos clave de su mandato: renovar la OEA, superar las divisiones actuales y convencer a Cuba de que vuelva a ser un miembro activo.

Vía: AFP
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El nuevo secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, se comprometió en su toma de posesión a lograr que el organismo continental sea más resolutivo y a buscar la integración plena de Cuba tras el levantamiento de su suspensión en 2009.

Con el "diálogo" como bandera, Almagro desgranó en su discurso de asunción los objetivos clave de su mandato: renovar la OEA, superar las divisiones actuales y convencer a Cuba de que vuelva a ser un miembro activo.

"Necesitamos más de la OEA", fueron sus primeras palabras como secretario general en el Consejo Permanente ante los embajadores y representantes de los 34 países que son miembros plenos de la organización, todos los del continente salvo Cuba.

Avalado por su gestión como canciller de José Mujica (2010-2015), Almagro asume el liderazgo de una OEA debilitada y en crisis por un mandato de cinco años en relevo del chileno José Miguel Insulza, que estuvo al frente del organismo toda una década.

El nuevo secretario general, que desde el principio descartó optar a la reelección, se comprometió hoy a que cuando deje el cargo la OEA sea un organismo "más cercano, más eficiente, menos burocrático y que contribuya a la resolución de los problemas del hemisferio y sus ciudadanos".

CRISIS POLÍTICAS

Uno de sus primeros desafíos será la crisis política en Venezuela, un asunto que conoce bien tras participar el año pasado en una misión dirigida a propiciar una mesa de diálogo político entre el Gobierno y la oposición junto a otros cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).

Preguntado en una conversación posterior con periodistas si con esa afirmación se refería a la crisis en Venezuela, el político uruguayo dijo no haber puesto "el caso de Venezuela por encima de ningún otro".

"Los países que tienen situaciones de crispación o conflicto o atrasos democráticos son obvios, nosotros no hemos puesto el caso de Venezuela por encima de ningún otro", señaló.

Otro de los grandes retos de Almagro será convencer a Cuba de que se reintegre como miembro activo en la organización tras el levantamiento de su suspensión en 2009 y en un contexto de acercamiento histórico entre la isla y EE.UU.

(EFE)

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