Fútbol Mundial

Euro 2016: así se vivió el adiós de Islandia en su capital Reikiavik

Decenas de miles de personas elogiaron a su selección

Reikiavik soñó, cantó, festejó, disfrutó, para terminar resignándose tras la clara derrota de Islandia (5-2) ante Francia, este domingo en cuartos de final de la Eurocopa, un torneo que enamoró al país y donde los 'Vikingos' firmaron una de las historias más bonitas y meritorias de la competición.

Cuando el partido terminó, los hinchas abandonaron tranquilamente el parque en el que decenas de miles de personas siguieron en una pantalla gigante el partido de París. Sin dejar la sonrisa, ni parar de cantar, aunque con la euforia inicial rebajada evidentemente.

La primera parte supuso un freno rápido al tren desbocado que parecía el optimismo de los 'Vikingos': 4-0 al descanso, todo decidido.

En las calles de la capital, bajo un sol que en esta época del año no se acuesta antes de medianoche, algunos fueron incluso a seguir la fiesta, a pesar de la derrota.

Islandia dio una vez más la imagen de un país alegre y optimista. Una marea humana de gente vestida de azul tiñó de color la tarde de domingo en Reikiavik.

La pendiente del parque donde estaba colocada la pantalla gigante hacia pensar en una enorme tribuna delante de una portería. No hay estadios para tanta gente en Islandia, donde el mayor recinto, el Laugardallsvöllur, tiene una capacidad para 15.000 espectadores.

Los héroes tienen previsto volver el lunes a Islandia y atravesarán Reikiavik en un autobús. Según los organizadores serán decenas de miles los aficionados que vayan a recibirles, en un país con 330.000 habitantes.

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